Sociedad
Tarragona se despide de la Clínica Monegal
El impulsor del hospital de la calle López Peláez, el cirujano Ramon Monegal, fue pionero en la creación de una compañía de seguros médicos

El edificio de la calle López Peláez quedará vacío el próximo fin de semana. El hospital se traslada delante de Les Gavarres, con más cartera de servicios.
La Clínica Monegal ha sido toda una institución para Tarragona. Durante muchos años, los tarraconenses se han dividido entre los que han nacido en La Monegal y los que no. Ha sido la clínica privada por excelencia de la ciudad. Y, este fin de semana, más de 90 años después de su llegada, La Monegal cerrará sus puertas de forma definitiva.
La empresa propietaria de la clínica en la actualidad, Viamed, abre un nuevo hospital, más grande y con más cartera de servicios, en la zona de Ponent, justo delante de Les Gavarres. El traslado de pacientes se prevé para este fin de semana. Será entonces cuando el edificio ubicado en la céntrica calle López Peláez bajará la persiana. El sueño del doctor Ramon Monegal Cerdà habrá llegado a su final. Conozcamos mejor la historia de La Monegal y de su alma mater.

Antigua habitación de la Clínica Monegal.
El origen de esta aventura se remonta en una fonda de las minas de Fígols, en el municipio de Cercs (Bergadà). Allí nace en 1908 el doctor y cirujano Ramon Monegal Cerdà.
Al acabar los estudios, en 1934, Monegal funda Asistencia Quirúrgica, una de las primeras compañías de mutuas privadas en Catalunya. Fue pionero en lo que ahora se conoce como red sanitaria privada. Con el tiempo, la iniciativa se extiende por toda Catalunya. El primer consultorio se ubica en la calle Bruc y, más tarde, se convierte en Clínica Monegal y se traslada a la calle Guillem Tell de Barcelona.
Y entonces llega la Guerra Civil. Monegal sigue con su actividad profesional y ejerce de médico y cirujano, ostentando el cargo de teniente en el ejército del bando republicano.

El doctor Ramon Monegal publicó este anuncio en el ‘Diario Español’ para dar a conocer la inauguración de consultorios.
Al terminar la guerra, el cirujano recupera su vida y decide extender su imperio por todo el país. En 1943 abre un consultorio en la calle Hermanos Landa de Tarragona –en la actualidad es la calle Unió–, y pone en marcha otros despachos en Amposta, Alcaníz, Berga, Manresa, Montblanc, Móra, Tortosa y Tremp. Viendo como de bien funcionaban los consultorios en la provincia de Tarragona, Monegal decide abrir una clínica en la ciudad en 1944. La ubica en la calle López Peláez, abierta hasta día de hoy.
En 1954, Monegal y su familia deciden abandonar Barcelona y trasladarse definitivamente a Tarragona. «Mi abuelo quiso mudarse a Tarragona porque se enamoró de la luz de la ciudad. Siempre decía que era muy especial, dorada como sus viejas piedras», explica Ramon Monegal, nieto del fundador de la Clínica Monegal, con el que ha podido hablar el Diari.
A partir de entonces, nuestro protagonista concentra sus esfuerzos en potenciar la clínica de Tarragona. Amplia las instalaciones en innumerables ocasiones y las moderniza cada vez más.
Poco a poco va ganándose la confianza y el prestigio en la ciudad. «Tanto mi abuelo como la clínica tenían un trato cercano y humano con los pacientes. Era uno de sus puntos fuertes, teniendo en cuenta que se trataba de un hospital pequeño», dice Montse Monegal, otra de las nietas.

Monegal entregó esta foto al colegio de médicos después de la Guerra Civil para poder ejercer.
Sus familiares le recuerdan como un hombre valiente, emprendedor y optimista, con mucha habilidad quirúrgica. Queda viudo hasta en tres ocasiones y tiene tres hijos. Francesc, quien también ejerce como cirujano, Ramon, ginecólogo –ambos trabajan en la clínica que funda su padre–, y Josep Maria, que es locutor y comentarista de radio.
Justo el día que se inaugura la última remodelación de la clínica, el 27 de septiembre de 1991, Monegal fallece a la edad de 83 años.
La clínica dejó de ser familiar
La Monegal no se vendió de un día para otro. Poco a poco fueron entrando en juego varias empresas que se iban haciendo con acciones. Actualmente, la propietaria del edificio y de la clínica es Viamed. La compañía anunciaba hace unos años que tiraba adelante el hospital privado más grande y con más cartera de servicios del sur de Catalunya.
Con la puesta en marcha del nuevo equipamiento, prevista para el próximo fin de semana, empieza el traslado y el edificio de La Monegal baja la persiana de manera definitiva.
Falta de reconocimiento
Ramon Monegal es uno de los nietos del artífice de la clínica. También es médico, en este caso en el CAP Muralles. Asegura que «me sabe mal que se pierda el apellido de la familia. Siempre he pensado que mi abuelo hizo mucho por esta ciudad y nunca se le ha reconocido», dice Monegal.
Montse, otra de las nietas, dice que le da mucha pena que cierre la clínica. «En ella he vivido desde que nací. Era nuestra casa», explica Montse, quien añade que «todavía ahora, cuando voy, me encuentro con caras conocidas. Y esto gusta mucha».
Tanto Ramon como Montse y el resto de familiares se han criado entre esas paredes de la calle López Peláez. A toda la ciudad nos costará pasar por allí y ver el edificio cerrado. A ellos, todavía más.