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Quedaban pocos días para que los huevos eclosionasen. Según explica el Grup Ecologista del Vendrell i Baix Penedès (Geven), era el primer nido detectado de chorlitejo patinegro esta temporada en las playas del Baix Penedès.
Pero esa puesta ha quedado destrozada. Los ecologistas señalan que los daños sufridos son compatibles con una acción humana. «Entorno al nido destrozado se han encontrado pisadas. Por tanto ha podido ser de manera malintencionada o por irresponsabilidad a la hora de llevar atados a los perros», apunta el Geven.
Había tres huevos. Dos estaban pisoteados y uno de ellos se ha encontrado abierto con el pollo en el interior». La puesta estaba en una zona acordonada y con carteles que indicaban que era un espacio de cría del ave.
Los ecologistas señalan que «no se puede descartar vandalismo, lo que hace más lamentable el hecho». El Geven explica que con la puesta perdida en El Vendrell, es la segunda dañada en el Baix Penedès esta temporada. Hace unos días se perdió otro nido en Calafell cuando unos niños cogieron los huevos.
El pasado año las playas de El Vendrell, Calafell y Cunit, después de décadas, fueron escogidas por esta especie amenazada para anidar . La tranquilidad del confinamiento favoreció a la eclosión de más de una decena de huevos.
Pero ahora, pese a que se han acordonado las zonas de nidificación, esas puestas están amenazadas por imprudencias e irresponsabilidad. También por el rechazo de quienes protestan porque se acordonen tramos de playa. La concejal de playas de El Vendrell denunció hace unos días que las cuerdas aparecen cortadas y los postes tumbados.
El Geven ha lamentado los hechos y destacan el valor natural que supone la cría de chorlitejo en las playas. En este sentido pide respeto hacia las área delimitadas.
En Calafell y Cunit, voluntarios de la Fundació Santa Teresa realizarán controles de los nidos y también darán información a los usuarios de las playas sobre la presencia de los nidos para intentar protegerlos.
También agentes cívicos de Calafell participan en la protección de los nidos y para pedir a los dueños de los perros que no suelten a sus mascotas en las áreas acordonadas. El Ayuntamiento ya señalizó la prohibición de la entrada de perros en esas zonas.
El Geven señala que «la playa no es sólo un recurso de explotación turística y económica y que es necesario convivir en equilibrio con ese hábitat».
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