Las obras para reformar por completo un entramado de calles en la zona de playa de Calafell ha comenzado con la tala de decenas de árboles, lo que ha levantado quejas en vecinos de la zona.
Señalan que en todas esas calles los árboles aportan sombra y ayudan a rebajar la temperatura en verano, además de formar parte del paisaje.
Reclaman que la retirada de los árboles va en contra de las nuevas exigencias urbanísticas por el cambio climático y que recomiendan que naturaleza ocupe más espacio en las ciudades para crear refugios climáticos que contribuyan a minimizar las olas de calor y las afectaciones para los ciudadanos.

Añaden que la presencia de árboles en las calles aporta calidad de vida humedad y tranquilidad, además de absorber CO2. Los vecinos señalan que en lugar de quitar árboles deberían plantarse más.
Moreras
Pero las sierras ya han cortado decenas de ejemplares, principalmente moreras como fase previa al inicio de obras que contempla eliminar aceras y crear una plataforma única en una decena de calles entre la vía del tren y el paseo marítimo y de la calle Rin a la de Loira. En total unos 25.000 m2 con una inversión de 10,5 millones.
Desde el Ayuntamiento de Calafell señalan que la reforma de tosas esas calles con aceras muy dañadas entre otros motivos por las raíces de los árboles que incluso dificultaban el paso por las aceras, contempla la renovación de canalizaciones de servicios bajo tierra.

«Las raíces incluso pasan bajo las actuales tuberías y redes de servicios, por lo que no se pueden renovar con los árboles», explica el concejal de Ecología Urbana Aron Marcos. Añade que alguno ejemplares estaban en mal estado. «No es el árbol más indicado para una traba urbana» ni para el clima costero como el de la zona, señalan.
Habrá más
Marcos explica que «en el proyecto de reforma de toda la zona se contempla plantar más árboles de los que se quitan y ganar en espacios verdes. «Además se estudia qué especies son las más indicadas para una función ambiental pero que a la vez tengan el mínimo mantenimiento sin que dañe el pavimento».
En este sentido se aplicará el Plan de arbolado que ya se impulsa en otras zonas para plantar especies adecuadas a cada zona.

Pero los vecinos temen que la zona pierda la frondosidad que hasta ahora presentaba. El concejal explica que los árboles que se plantarán también aportarán esa presencia verde y la sombra recomendada para las cada vez más frecuentes olas de calor.
Marcos señala que el proyecto de obras tiene en cuenta el criterio de ganar zonas ajardinadas que además eviten la acumulación de agua en día de lluvia intensa.