Banca
Los accionistas del Banc Sabadell aprueban la venta de TSB y el reparto de dividendos
Los directivos del banco catalán ha reiterado que esta operación es completamente independiente a la opa hostil del BBVA

El presidente del Banc Sabadell, Josep Oliu, durante su intervención en la Junta General Extraordinaria de Accionistas de la entidad
Los accionistas del Banc Sabadell han aprobado en la dos juntas de accionistas extraordinarias de hoy la venta de la filial británica TSB al Banco Santander por valor de 2.650 millones de libras, unos 3.050 millones de euros, sin ningún voto en contra y el reparto extraordinario de dividendos provenientes de esta operación de 0,5 euros por acción, que en total será 2.500 millones de euros de dividendos. Al estar en marcha el proceso de la opa lanzada por el BBVA sobre el Sabadell, el consejo de administración necesitaba la autorización previa de los accionistas para ejecutar la venta de la entidad británica, especializada en el mercado hipotecario del Reino Unido y que el banco catalán adquirió el 2015 por 1.700 millones de libras (1.950 millones de euros, al cambio actual).
El presidente del Sabadell, Josep Oliu, ha señalado durante la junta que la venta de TSB es "independiente de la opa" y ha asegurado que se habría propuesto también "en un contexto sin opa, por su clara aportación beneficiosa para el banco y sus accionistas". También ha afirmado que, con la imposición de la condición establecida por el Gobierno, la opa del BBVA "no permitirá generar sinergias". También remarca que, a la hora de posicionarse sobre la oferta, los accionistas deben "considerar los riesgos derivados del proceso de integración".
Según ha explicado Oliu, desde el 2021 habían recibido varias muestras de interés de entidades que querían comprar el TSB, propuestas informales que no se habían atendido. "Recientemente, los buenos resultados de TSB y las condiciones del mercado británico habían puesto a nuestro filial en el punto de mira de los grandes bancos de aquel país, de forma que se recibieron nuevas manifestaciones de interés, algunas muy concretas e interesantes", ha revelado. Ante estas ofertas, el Sabadell abrió un "proceso competitivo restringido" dirigido a las entidades que ya se habían interesado anteriormente. Este camino acabó con ofertas "vinculantes" con un valor "significativo" que se concretó con la oferta del Banco Santander, entidad con una enorme presencia al mercado británico desde hace años, cuando compró Abbey.
Por lo que respecta al reparto de los dividendos, Oliu ha avisado que "si no se es accionista en el momento del pago, previsiblemente el abril de 2026, porque se han vendido las acciones o se acepta la oferta del BBVA, no se podrá cobrar el dividendo extraordinario", también ha pedido a los presentes que reflexionen sobre la operación durante el verano. Tal como ha destacado la cúpula del Sabadell, la distribución del dividendo extraordinario surgido de la venta de la filial del Reino Unido servirá para trasladar a los accionistas "gran parte" de "el excedente de capital" que se producirá si esta sale adelante. Según Oliu, esto va en línea con la política de remuneración a los inversores que se había diseñado y aprobado antes de conocerse la opa del BBVA.
"Constituye una oportunidad de ejecutar la desinversión en un momento particularmente propicio, cristalizando un valor significativo", ha insistido el presidente del Sabadell diciendo que los asesores financieros de la operación han apoyado la propuesta resaltando que el precio es "razonable" por los intereses de la entidad catalana. Además, ha dicho que la operación es positiva porque aporta un dividendo extraordinario a los accionistas, decisión que encaja con el objetivo de remunerar más a los propietarios del banco cuando el capital no sea necesario para financiar el crecimiento del banco.
Posición de los accionistas
La junta ha contado con la intervención de varios accionistas, que han apoyado públicamente la venta de TSB y han avalado la gestión de la dirección del banco desde el anuncio de la opa del BBVA. En el caso del accionista Joan Bril ha dicho que la venta de la filial británica, que dio problemas en el pasado, se ha convertido ahora en un "escudo" contra la operación lanzada desde el BBVA. Por su parte, el accionista Josep de Marfà ha destacado que algunos pequeños accionistas hacía años que defendían la venta del TSB, operación que ahora es mucho más adecuada que hace un tiempo por el importe que se ha pactado con el Banco Santander. "Nuestro voto es, evidentemente, afirmativo", ha indicado antes de proclamar que "el Sabadell a Sabadell". Por otro lado, algunos accionistas han exigido que se mantenga la política de retribución aunque la opa no tire adelante.
La participación de la primera junta de accionistas fue la más alta de los últimos 20 años, ya que asistieron el 74,8% del capital social. En la segunda junta, la participación fue ligeramente menor, del 69,35% del capital social.