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Lidl invertirá 13 millones en adecuar unas instalaciones de 40.000 metros cuadrados en Constantí (Tarragonès) y usarlas como almacén provisional, dado que sus “necesidades operativas” hacen que tenga que contar con una plataforma logística a la zona antes del 2026, cuando estarán a punto sus instalaciones definitivas.
En un comunicado, Lidl explica que este almacén provisional se pondrá en marcha a mediados del 2024 y “le permitirá atender temporalmente sus crecientes necesidades operativas en el nordeste del país, anticipándose también con esto a la construcción de su futuro centro logístico en este municipio”.
Este almacén provisional, que se ubica a “escasos kilómetros de distancia” del que será definitivo, contará con cuatro módulos de almacenamiento y medio centenar de muelles de carga.
Lidl ocupará estas instalaciones después de cerrar un arrendamiento con opción de compra -’leasing’, en inglés- con Tristan Capital Partners y Kefren Capital Real Estate.
El pasado mes de julio, esta cadena de supermercados alemana anunció que el 2026 pondrá en marcha un almacén -que ya será definitivo- en Constantí, que se ubicará en una parcela de unos 185.000 metros cuadrados que tiene en propiedad.
Este centro iniciará su actividad después de los otros tres que prevé inaugurar hasta el 2025: uno en Escúzar (Granada), otro en Martorell (Baix Llobregat) y un tercero en Parla (Madrid).
En Catalunya, los futuros almacenes a Martorell y Constantí se sumarán al que Lidl tiene desde el 2003 en Montcada i Reixac (Vallès Occidental), desde el cual alcanza principalmente sus más de 70 puntos de venta en la comunidad.
