Reus es el municipio de la comarca del Baix Camp que menos recicla. Según los últimos datos del 2019 de la Agència de Residus de Catalunya (ARC), la ciudad tan solo recicla el 32,40% de los resiudos que genera. En la cola también se sitúan Les Borges del Camp (34,66%) y Vinyols i els Arcs (36,13%). Reus ha mejorado respecto el 2018 en que tan solo recicló el 29,86% de sus residuos. Pero, aun así, está lejos de cumplir la normativa europea aprovada en 2008 que para el año 2020 se marcó como objetivo reciclar el 50% de los residuos de los municipios y el 65% para el año 2035. Aquellos Ayuntamientos que lo incumplan, se enfrentarán a sanciones.
Por otro lado, los municipios que mejor reciclan sus residuos son Riudecanyes (77,36%), Riudecols (75,21%) y Pratdip (68,72%). Tanto en Riudecanyes como en Riudecols hay implantado el sistema de recigida puerta a puerta.
En cuanto al Baix Camp, esta cifra se sitúa en el 45,58%, dato que supera en prácticamente un 2% el 43,75% de la recogida selectiva del año 2018.
Con el objetivo de mejorar el reciclaje en la ciudad, el Ayuntamiento de Reus tiene previsto instalar contenedores inteligentes que funcionen a través de una tarjeta individual de identificación. Por el momento, el Ayuntamiento ha presentado el proyecto a la Unión Europea, a través del programa FEDER para conseguir confinaniciamento. También contemplan eliminar contenedores soterrados del núcleo antiguo y sustituirlos por islas de contenedores emergentes.
Antes de decretarse el estado de alarma, el Ayuntamiento también inició una campaña cívica con inspectores y educadores ambientales para informar a la ciudadanía cómo se debe hacer la recogida selectiva y cómo se deben depositar los desperdicios en los contenedores.
En el ámbito comarcal, desde el 1 de julio la Deixalleria Mòbil de Secomsa (Serveis Comarcals Mediambientals, del Consell Comarcal del Baix Camp) está recorriendo, desde el 1 de julio, los diversos municipios de la comarca en los que la empresa presta sus servicios. El objetivo es fomentar la recogida de residuos especiales, al tiempo que sensibilizar a la ciudadanía de la importancia de hacerlo. De momento, el servicio ya ha pasado por 12 municipios, habiendo recogido un total de 4,46 toneladas de residuos especiales gracias a las aportaciones que han realizado, hasta ahora, 434 personas, según los datos facilitados por el Consell Comarcal del Baix Camp.
Tal como explica la presidenta de Secomsa, Rosa Abelló, la Deixalleria Mòbil es un proyecto que se ha recuperado anteriormente. «Se habían acabado convirtiéndo en vertederos, así que decidimos adecuarlo de nuevo y ofrecerles nuevamente a la casi una treintena de municipios donde Secomsa presta servicio, creando un calendario. De momento, lo han pedido un total de 18 », detalla Abelló.
La ruta se inició en Maspujols, donde se lograron recoger 140 kilos. El principal residuo fueron las pilas, representando un 25% del total, seguido de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) (21%), bombillas y fluorescentes (16%), tóners (10%) y textil (7%). Las cifras varían en función del municipio, pero en la mayoría, la tipología de residuo que la ciudadanía más frecuentemente lleva a la recogida móvil están siendo las pilas y los aparatos eléctricos y electrónicos. En algunos casos, como Vilaplana, también destacan los CD / DVDs, llegando a representar el 16% de los residuos llevados al punto móvil.
De los doce municipios que, hasta el momento, han contado con el servicio de Deixallaria Mòbil de Secomsa, Riudecols es la población en la que más kilos de residuos se han recogido, con un total de 820 aportados por 71 personas.
La Deixalleria Mòbil ambién ha pasado estas últimas semanas por las Borges del Camp, L’Aleixar, Maspujols, Vilaplana, Botarell, Prades, Alforja, Montbrió, L’Albiol, Almoster y Riudoms. En este último caso, el alcalde del municipio, Sergi Pedret, remarca que se han alcanzado «muy buenos resultados», habiendo recogido 400 kilos. «La recogida móvil es una muy buena iniciativa. Por un lado, se fomenta el reciclaje de los pequeños residuos y, por otro, la más importante, el trabajo de concienciación que se está llevando a cabo », detalla el alcalde.
Un equipo de educadores
La Deixalleria Mòbil cuenta con un equipo de educadores ambientales. Son los que se encargan de atender a la ciudadanía a depositar los residuos que llevan encima. Y es que el objetivo del servicio es ayudar a recoger de forma correcta aquellos residuos que no se pueden depositar en las áreas de contenedores, como pilas, pequeños electrodomésticos, toners, pinturas, bombillas y fluorescentes, espejos, aceite...
La directora de Secomsa, Rosa Abelló, explica que los informadores forman parte de un plan de empleo del SOC. «Ayudan a la gente que se acercan al centro de recogida, van a tiendas e informan a la gente que ha llegado el servicio al municipio ... Era una tarea necesario, sobre todo ahora al principio, con la reanudación de este equipamiento».
