El Hospital Sant Joan pagará los objetivos a los trabajadores si no genera déficit
Comité de empresa y dirección firman el nuevo convenio laboral 2017-2019 que vincula el pago de las DPO a los resultados económicos del centro. El acuerdo pone fin a meses de negociaciones

Pellicer y Llauradó junto con representantes sindicales y de la dirección del Hospital, hoy durante la firma del convenio.
La paz laboral ha llegado al fin al Hospital Sant Joan de Reus. Tras meses de protestas por parte de los trabajadores y de duras negociaciones con la dirección del centro, ambas partes han firmado hoy el nuevo convenio laboral. Su entrada en vigor será con efectos desde el 1 de enero de este año y tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2019 (con seis meses de ultra actividad).
La presidenta del comité de empresa, Alicia Martín, se ha mostrado muy satisfecha tras rubricar un acuerdo que supone mantiene un convenio propio. Cabe recordar que una de las «prioridades» de los trabajadores era evitar pasar a depender del convenio laboral del sector (Siscat), que ofrece peores condiciones laborales. No obstante, Martín no ha escondido que«el nuevo convenio es un documento de mínimos porque hemos tenido que hacer muchas concesiones». Las principales, la actualización de los salarios y, sobre todo, la relacionada con el pago de las retribuciones variables en función de los objetivos (DPO). Y es que con el nuevo convenio laboral, el pago de las DPO queda vinculado a los resultados económicos del centro y sólo se abonarán en caso de que éste presente equilibrio presupuestario.
De hecho, la aceptación de esta cláusula ha generado fuertes discordancias dentro del comité de empresa. Sin ir más lejos, durante la firma del convenio uno de los representantes de la CGT ha anunciadoque no firmarían el documento porque consideraban «injusta» la cláusula. Y no fue el único. Las representantes del Sindicat Professional d’Infermeria (Satse) también se han desmarcadodel nuevo convenio laboral. En su caso, porque el redactado no recoge el aumento del 1% de la masa salarial acordado en 2016 para aplicarlo a todos los colectivos por igual.
Las discrepancias dentro de la plantilla que integra el Hospital Sant Joan no son ninguna novedad, ya que el comité de empresa está muy atomizado con siete sindicatos distintos. Todos ellos suman un total de 23 delegados sindicales, de los cuales seis de ellos corresponden a los dos disidentes (CGT y Satse).
‘Mejores condiciones’
La firma del nuevo convenio laboral se ha llevado a cabo hoy tras la celebración del consejo de administración del Sant Joan que ha validadoel documento. Su presidenta y concejal de Salut, Noemí Llauradó, ha valoradode forma «muy positiva» el acuerdo por el esfuerzo que ha supuesto y porque garantiza «un convenio propio para el centro con mejores condiciones para los trabajadores». También se ha referido al hecho de que su firma ratifica la confianza de la ciudad al respecto de la constitución del consorcio que deberá gestionar el Hospital de Reus a partir del año que viene.
Los principales aspectos que contempla el nuevo documento son: Vigencia de tres años con seis meses de ultra actividad; La actualización de los salarios, durante la vigencia del convenio, en el límite que establece la Ley de Presupuestos Generales del Estado para el personal del sector público; el acceso al nivel D de carrera profesional, hasta ahora congelado, de todos los profesionales que reúnan los requisitos y el referente a las DPO.
La negociación entorno al nuevo convenio laboral, que había pospuesto su firma hasta en tres ocasiones, ha estado marcada en todo momento por la fuerte movilización de los trabajadores. Muchos de ellos incluso llegaron a encerrarse toda una noche en el hospital como medida de protesta tras denunciar que se querían aplicar los «recortes más grandes de la historia». Tampoco puede pasar por alto que todo este proceso terminó con la destitución del anterior director del Sant Joan y de Sagessa, el doctor Jordi Colomer, y con el comité de empresa denunciando a la dirección del centro ante la Inspecció de Treball por impago de las retribuciones variables en función de los objetivos de 2015 y 2016.