Próxima estación: Túnels del Garraf. Tres meses en vía única

Los usuarios del corredor sur pensaban que, tras las obras del túnel de Roda de Berà, se acabarían las afectaciones y que el servicio ferroviario con Barcelona recuperaría la normalidad. Pero, cuando los operarios todavía no han abandonado Sant Vicenç de Calders y la R-4 está patas arriba, con limitaciones de velocidad que provocan retrasos todos los días, el foco se sitúa ahora sobre los Túnels del Garraf, la siguiente estación de este vía crucis de obras que marcará la arrancada del nuevo curso.

El calendario aún no está confirmado por Adif, aunque en la programación del administrador de infraestructuras se incluye dentro de las actuaciones para este último cuatrimestre de 2025. Las fechas podrían cerrarse cuando finalicen las obras de la R-4 –previsiblemente a inicios de 2026–, ya que de esta forma los trenes podrán desviarse por esta vía interior.

Un primer paso antes del proyecto definitivo

La actuación que se plantea en los Túnels del Garraf, comportará que, durante tres meses, este punto se convierta en un cuello de botella, en vía única, con importantes restricciones sobre los servicios ferroviarios. En concreto, las líneas que se verán afectadas son la R-2 sur de Rodalies, así como la R-13, R-14, R-15, R-16 y R-17 de Regionals.

Se trata de una reforma puntual que afectará a la línea de mar. La intervención es un ‘parche’ que servirá para mejorar la infraestructura a la espera de que se aborde el proyecto definitivo, mucho más ambicioso. Este debe servir para adaptar este tramo a las especificaciones técnicas de seguridad establecidas por la normativa europea de 2014, por lo que desde hace tiempo se plantea una ampliación para habilitar galerías de evacuación. ¿Cómo va a hacerse? Se trata de un tramo de más de nueve kilómetros de longitud, en el que se encadenan diferentes túneles con dos bocas, una por cada sentido de la marcha.

El proyecto que plantea Adif es mantener la vía par en servicio y cortar la impar para ampliar las bóvedas, lo que permitiría habilitar una doble vía con andenes a cada lado. Así, la boca que inicialmente se mantendría en servicio podría utilizarse como salida de evacuación en caso de emergencia.

Entre Rodalies y Regionals, cada hora pasan entre diez y doce trenes por este tramo. Si las obras se hacen así, supondría que mientras estas duren (que podrían ser unos cuatro años), se circularía en vía única. Los usuarios saben que esta es una obra clave para la mejora del servicio, ya que esto comportará que los trenes puedan incrementar su velocidad y pueda reducirse el tiempo de viaje. No obstante, estos defienden que «no queremos una obra low-cost, porque si dejamos este tramo en vía única, será diez veces lo que ha pasado con el túnel de Roda», afirmaba al respecto hace unos meses Gómez Llauradó.

La opción que defienden los usuarios es que se construya un nuevo túnel paralelo a los existentes, con una doble vía. Esto permitiría no tener que cortar la circulación y, ya que estaría adaptado a los estándares de seguridad, se podría incrementar la velocidad de los trenes de los 120 km/h actuales a 200.

El secretario para la Mobilitat i Infraestructures de la Generalitat, Manel Nadal, aseguraba este fin de semana a través de la red social ‘X’, que «de cara al corte de larga duración, tenemos que ver si hay alternativas. Evidentemente, la seguridad es prioritaria». Adif, Renfe y la Generalitat deben empezar a trabajar en la planificación a corto y a medio plazo de la obra para evitar un nuevo caos ferroviario.

R-3: dieciséis meses de corte ferroviario

Las obras que se plantean tensionarán un servicio ferroviario que permanece en la UCI, y que recibe atención asistida desde múltiples puntos. Si el año pasado fue Roda de Berà, este otoño el foco se situará sobre la R-3.

A partir del 27 de septiembre, este eje estratégico que conecta L’Hospitalet de Llobregat con Puigcerdà, verá interrumpida su circulación durante 16 meses en uno de sus tramos más sensibles: entre Montcada Bifurcació y La Garriga, en pleno Vallès Oriental. ¿La causa? Unas obras de envergadura histórica: el desdoblamiento de 17 kilómetros de vía única entre Parets del Vallès y La Garriga. Por la duración, la complejidad y el volumen de viajeros implicados, la afectación es inédita, aunque el túnel de Roda ha servido para mejorar ciertos aspectos de la planificación de cara a nuevos cortes.

El ministro de Transporte, Oscar Puente, afirmó este fin de semana que «ya se notan resultados» en las mejoras que se están haciendo, pero que todavía «falta tiempo» porque la red ferroviaria «es víctima de años de desinversión». A pesar de ello, advirtió de que el nivel de ejecución actual ha llegado a «un límite al que no pueden hacerse más obras y actuaciones sin afectar el funcionamiento normal del servicio». «Si queremos mantener la prestación del servicio y compatibilizarla con la realización de obras, no podemos invertir más. Podemos invertir más si paramos».

Sant Vicenç de Calders llega a la recta final

La buena noticia es que este mes de septiembre finalizan las obras de instalación del tercer carril en la estación de Sant Vicenç de Calders. Estas se iniciaron el pasado otoño y todavía hoy los usuarios de la R-13 tienen que hacer transbordo para llegar a Barcelona.

Adif no ha informado sobre la fecha de finalización de los trabajos, pero esta se sitúa a lo largo de esta primera quincena de septiembre. La fecha definitiva podría depender del tiempo que se prolonguen las marchas blancas, que eviten una arrancada con incidencias como la de marzo. Pese a ello, Sant Vicenç de Calders volverá a la ‘normalidad’ después de unas obras que limitan la operativa de los servicios de pasajeros, a causa del tercer carril para las mercancías. Los responsables políticos se dieron cuenta de este ‘error’ cuando las obras ya estaban en marcha y era difícil la vuelta atrás, lo que significa que más pronto que tarde tendrá que volverse a intervenir.

Vuelven los transbordos

Todavía no se sabe cómo ni cuándo. El nuevo proyecto está en fase de redacción, lo que sí está confirmado es que las obras en este corredor no acaban y que antes de acabar este mes de septiembre volverán los autobuses. Será entre los días 22 y 28 de septiembre, cuando a causa de las obras que Adif ejecuta en la estación de Castelldefels, tendrá que habilitarse un servicio alternativo por carretera para los viajeros de la línea R-2 Sur y los Regionals del sur. Las afectaciones serán en el tramo desde Gavà a Sitges, de forma que los pasajeros de las líneas R-14, R-15, R-16 y R-17 tendrán que hacer cambio en Cunit.