Prevención de incendios
Nou Vendrell: "Que no nos pase como en Galicia"
Vecinos de la urbanización reclaman medidas de prevención al estar rodeados de bosque lleno de maleza

No Vendrell vive junto al bosque
El pasado mayo un pequeño fuego volvió a levantar las alarmas entre los vecinos de Nou Vendrell, una urbanización rodeada de bosque. Aquel fuego pudo controlarse con rapidez inicialmente gracias a la intervención de los vecinos.
Pero para los vecinos fue un nuevo aviso. Sus casas acarician el bosque. O el bosque acaricia sus casas. Sin una necesaria separación de seguridad. Matorrales, ramas bajas y secas que son una amenaza.

Vecinos de Nou Vendrell reclaman franjas de seguridad e hidrantes.
La imágenes de los devastadores incendios en Galicia, Castilla Leon y Extremadura, además de la pena por esos fuegos, les hacen mirar con recelo por sus ventanas. «No queremos que nos pase como en Galicia», dicen.
Nieves Rodríguez es gallega pero lleva años en Nou Vendrell. «Que aquí no pase. Que haga algo a quien corresponda. En caso de fuego no tendríamos por donde salir».
Firmas
El pasado mes de agosto, la concejal de Fem Vendrell, Mar Vázquez, presentó en el pleno una petición para reclamar medidas de prevención que reduzcan riesgos de incendio en Nou Vendrell, pero también en otros núcleos con una densa masa forestal cerca que es un polvorín que no cumple con las necesarias medidas de prevención.

El bosque que rodea a Nou Vendrell.
Los vecinos de Nou Vendrell han presentado al Ayuntamiento 226 firmas pidiendo sanear el entorno de su urbanización. Porque una colilla, una chispa, un vidrio roto... puede desencadenar un fuego que se propagaría con rapidez junto a sus casas.
«Nadie limpia el bosque, hay mucha maleza, mucho pino y tenemos las casas al lado», señala Encarnación Ruiz. «Pero no nos hacen caso».
Con las retinas impregnadas de los incendios que han asolado parte del país los vecinos de Nou Vendrell viven con miedo. Alfonso Navarro vive enfrente del bosque. «Llevamos años protestando y el Ayuntamiento nos dice que tienen que hacer un estudio.

La riera que pasa junto a la urbanización
Navarro recuerda el fuego de mayo. Explica que en el núcleo hay tres bocas antiincendios. Una pegada al bosque, otras dos en el interior del núcleo. «En aquel fuego los bomberos fueron a cargar agua en una boca, pero no estaba conectada a la red».
Navarro señala además al peligro del estado de la riera que pasa junto a la urbanización y que está llena de maleza. Además de un riesgo de desbordamiento en caso de avenida de agua, esos corredores naturales son uno de los más rápidos propagadores del fuego.
Protección Civil recuerda la obligación de abrir esas franjas perimetrales y contar con una red de hidrantes homologados además de la limpieza de vegetación seca en las parcelas no urbanizadas.