El regreso más polémico de Alan Godoy al Nou Estadi
Alan Godoy, que estuvo muy cerca de regresar a Tarragona en este pasado mercado invernal, acude este domingo al Nou Estadi con el Barça Atlétic

Alan Godoy vuelve este
domingo al Nou Estadi.
La actualidad del Nàstic de Tarragona, con las dudas sobre la continuidad de Dani Vidal en el banquillo, ha provocado que el regreso de un antiguo deseo quede en un segundo plano. Alan Godoy, el fichaje frustrado del pasado mercado de invierno, regresa a Tarragona este domingo con la zamarra del Barça Atlètic, el club que lo firmó tras truncarse su traspaso al conjunto grana. Se trata de un regreso con polémica, de ser el héroe grana a convertirse en villano. Muchos aficionados apuestan por un recibimiento hostil, siempre dentro de los límites, mientras que otros prefieren quedarse con el recuerdo de su rendimiento en Tarragona y abogan por aplaudirle.
Godoy fue, hace apenas dos meses, el nombre propio del mercado de invierno en Tarragona. Un fichaje que pasó de imposible a factible y a casi hecho conforme avanzaba la ventana de fichajes. El deseo del canario impulsó una operación que parecía improbable en las primeras semanas de mercado. Godoy había recibido ofertas muy superiores en lo económico, e incluso filiales de la talla del Real Madrid Castilla y Barça Atlètic se habían interesado por sus servicios. Sin embargo, el delantero de Las Palmas tenía claro que su intención era volver a Tarragona, priorizando lo deportivo por encima de lo económico.
El ariete, sin minutos en el Eldense, quería regresar al club grana, donde exhibió su mejor fútbol en su corta carrera. Al Nàstic llegó cedido en la segunda vuelta de la pasada temporada y logró seis goles que dejaron al conjunto grana muy cerca del ascenso a Segunda División. Godoy vivió aquel fatídico 22 de junio de 2024 en el que el sueño del ascenso se hizo añicos. Aquello le marcó y entendió que una espina se quedaba clavada en Tarragona.
Por eso, y ante la falta de oportunidades en Elda, el canario priorizó regresar a Tarragona y fue dándole forma a un movimiento que, en las dos últimas semanas de mercado, acaparó muchos titulares. El Nàstic entendió que fichar a Godoy supondría un impulso anímico y deportivo y, por ello, decidió hacer un esfuerzo económico. Lo que parecía imposible se convirtió en realidad y se alcanzó un acuerdo con el Eldense. En aquel momento, la operación de Alan Godoy se daba casi por cerrada.
Sin embargo, la negociación con el jugador, que parecía un mero trámite, se complicó hasta el punto de romper la operación. Una cláusula en el contrato lo truncó todo. El canario exigía libertad sin coste en caso de no ascenso, algo que el Nàstic no aceptó por considerarlo inviable económicamente. Lo que parecía un simple fleco terminó por dinamitar las negociaciones.
Con el Nàstic ya descartado, Alan Godoy volvió a activar el mercado y el Barça Atlètic entró de lleno en escena. El filial azulgrana fue finalmente el equipo que se hizo con sus servicios, ofreciéndole un suculento contrato que le vinculaba con los azulgranas hasta el 30 de junio de 2027.
Su fichaje por el Barça Atlètic sentó muy mal a una afición tarraconense que vivió unos días de rabia e impotencia. La llegada de Godoy ilusionaba mucho y al tenerla tan cerca y finalmente no darse generó un sentimiento de decepción mayúscula en unos seguidores que habían inundado las redes sociales de mensajes de apoyo a Godoy antes de que se descartase su fichaje.
Desde su llegada a Barcelona, Godoy se ha convertido en un actor indiscutible en los planes del filial culé. El día después de firmar debutó con la zamarra azulgrana en la derrota en Zubieta por 3-0. Desde entonces, el canario ha encadenado tres titularidades consecutivas y, en la jornada pasada, se estrenó como goleador. El de Las Palmas de Gran Canaria marcó un buen gol de cabeza frente al Arenteiro, pero no pudo evitar otra derrota de un Barça Atlètic que atraviesa una crisis de resultados imponente y que se ha instalado en la penúltima posición.