El Nàstic rompe un fichaje por los insultos del jugador en un pasado

El Gimnàstic de Tarragona, SAD, ha decidido poner punto y final a la  incorporación de José Manuel Calderón, que el club grana ya había oficializado este mediodía. Tras horas de intensas valoraciones, el club ha optado por no formalizar un fichaje que ya había anunciado, dejando así un claro punto y aparte en su planificación deportiva para la temporada 2025-2026.

Lejos de ser un paso atrás, esta decisión refleja la firmeza del Nàstic en mantener intacta su identidad y la conexión con una afición que exige no solo talento, sino también compromiso y respeto por la historia y los valores que definen al club y a la ciudad de Tarragona y Catalunya. 

El club lamenta cualquier molestia que esta inesperada renuncia pueda causar entre sus socios, accionistas y seguidores, y se reafirma en su objetivo: construir una plantilla capaz de pelear con ambición y pasión en el próximo curso.

La polémica que ha frenado el fichaje de Calderón tiene su origen en un episodio ocurrido en junio de 2024. En aquel momento, el lateral andaluz militaba en el Córdoba CF y celebraba el ascenso a Segunda División tras vencer al filial del Barça. Durante un directo en Instagram, Calderón lanzó un mensaje incendiario: «Me cago en los muertos de todos los catalanes». Un insulto que se viralizó de inmediato, provocando una oleada de críticas y encendiendo un debate profundo en el fútbol catalán y en la sociedad.

Horas más tarde, el propio jugador intentó atenuar la tensión con una disculpa pública: «Pido perdón a toda la gente de Barcelona y a todos los catalanes por mis actos durante el directo de esta tarde». Sin embargo, el eco de aquellas palabras ha sido demasiado intenso para el club tarraconense, que ha optado finalmente por cerrar esta puerta y concentrar todos sus esfuerzos en una planificación sin fisuras.