Si hay dos futbolistas de la plantilla del Nàstic que esperan el partido contra el Deportivo de La Coruña con especial interés son Gorka Santamaría y Pablo Trigueros. Dos futbolistas que militaron en el conjunto coruñés, aunque no coincidieron, pero que apenas tuvieron presencia en el Estadio Riazor.
Pablo Trigueros firmó en verano de 2021, procedente del CD Mirandés, Dejaba un Segunda División para sumarse a un Deportivo con la clara intención de regresar al fútbol profesional tras una temporada en Segunda B.
En Anduva no había tenido el protagonismo esperado y buscaba ser importante en un histórico del fútbol español, aunque supusiera bajar un escalón. El técnico deportivista por entonces, Borja Jiménez, se aferró a la pareja de centrales formada por Jaime y Adrián Lapeña. El central toledano únicamente disputó en liga ocho partidos, cuatro de ellos como titular, para un total de 303 minutos en toda la campaña. En Copa del Rey tuvo más participación. Jugó las dos eliminatorias. La primera ante el UCAM Murcia (3-4), que se alargó 120 minutos, y la segunda, en Riazor frente al Osasuna (1-2) que apeó a los gallegos del torneo.
Pablo Trigueros lleva dos goles con el Nàstic, mientras Gorka todavía no se ha podido estrenar
La temporada siguiente, Pablo Trigueros se marchó a la Cultural Leonesa, donde sí fue un central fijo y consiguió la atención de la dirección deportiva del Nàstic.
El paso de Gorka Santamaría por Coruña fue más breve y mucho más complicado. Fue el primer fichaje del RC Deportivo de la temporada 2022-23. El ‘9’ que iba para asumir el rol de goleador del equipo. Los 15 goles en el CD Badajoz le precedían. También una pretemporada en la que tuvo la plena confianza de Óscar Cano. El técnico le había dirigido en el club pacense unos meses antes, pero el reencuentro, en temporada oficial, no fue tan idílico como podría presuponer el bilbaíno. En el mercado de invierno cerraba su etapa coruñesa con 13 partidos de liga, 2 como titular y un partido de Copa del Rey, la eliminación frente al Guijuelo (2-0).
Una salida dolorosa para Gorka
La salida fue complicada y dolorosa como ha admitido el propio Gorka Santamaría esta semana en una entrevista en La Opinión de A Coruña. Le molestó que no fuera el mismo Óscar Cano el que le comunicara su decisión de prescindir de él y las formas en las que se produjo su marcha. Fue un despido deprisa y corriendo, sin negociación ni acuerdo previo, que coincidió con el regreso de Lucas Pérez al club gallego.
Gorka volvió a Badajoz, pero sin conseguir la misma felicidad. Marcó 4 goles en 19 partidos y no pudo evitar el descenso del conjunto pacense. Con la libertad bajo el brazo, el vizcaíno se decidió por seguir su carrera en el Nàstic.
En Tarragona, Pablo Trigueros y Gorka Santamaría están teniendo diferentes roles. El defensa toledano es un fijo. Un pilar de la zaga grana y también en las acciones a balón parado. El futbolista de 30 años ya ha marcado dos goles. El último en la pasada jornada, frente a la Real Sociedad B. Gorka, por su parte, todavía no se ha estrenado, aunque no ha tenido el mismo protagonismo.
Solamente ha sido titular en 2 de los 9 partidos que ha jugado. 272 minutos en los que ha tenido ocasiones para lograr su primer gol con la camiseta del Nàstic, pero sin éxito. Este domingo, a las 19.00 horas, si nada se tuerce, estarán los dos en el Estadio Riazor. Con esa espinita clavada de no haber podido triunfar con la camiseta del Deportivo y con ganas de reivindicarse.
