Peste porcina africana
El conseller que gestionó la crisis porcina del 94 reclama medidas drásticas contra los jabalíes
La principal diferencia con el brote de 2025 es que en aquella ocasión existía una vacuna (aunque no estaba autorizada), y que ahora la enfermedad solo circula entre jabalíes, es decir, fauna salvaje, mientras que hace 30 años entró directamente en las granjas.

El exconseller de Agricultura entre 1992 y 1999, Francesc Xavier Marimon
El exconseller de Agricultura entre 1992 y 1999, Francesc Xavier Marimon, recomienda al Govern dar “barra libre” para eliminar jabalíes en toda Cataluña ante el riesgo que suponen para propagar rápidamente la peste porcina africana (PPA). Marimon gestionó en 1994 el brote de peste porcina clásica que afectó a Cataluña y a algunas zonas del Estado. En una entrevista con la ACN recuerda que aquella crisis fue muy importante porque afectó a granjas industriales y obligó a sacrificar cerca de un millón de animales. El sector salió reforzado gracias a las ayudas de la Unión Europea, y el exconseller recuerda que el entonces presidente Jordi Pujol estaba “absolutamente implicado”.
Marimon relata cómo vivió la crisis de peste porcina clásica de 1994, que golpeó principalmente a explotaciones de la demarcación de Lleida y las comarcas centrales. La principal diferencia con el brote de 2025 es que en aquella ocasión existía una vacuna (aunque no estaba autorizada), y que ahora la enfermedad solo circula entre jabalíes, es decir, fauna salvaje, mientras que hace 30 años entró directamente en las granjas.
Aun así, explica que actuaron de forma “muy similar” a como se ha hecho ahora: se cerraron las zonas con granjas afectadas y se procedió al sacrificio y “entierro inmediato” de los animales. Fueron cerca de un millón de cerdos sacrificados en seis meses. Marimon asegura que el sector “se recuperó bien”, sobre todo porque la Unión Europea “se portó extraordinariamente bien” y el Ministerio de Agricultura —entonces dirigido por Loyola de Palacio— también, aunque el Govern tuvo que hacer un “esfuerzo notable”. La UE se hizo cargo del 50% del coste de los animales sacrificados y el resto se repartió a partes iguales entre el Estado y Cataluña.
Marimon recuerda que el presidente Pujol le hacía seguimiento diario de la situación y repetía que el sector debía recibir apoyo para superar la crisis. El exconseller admite que fue una “lucha dura”, pero destaca la colaboración de los ganaderos y, especialmente, de los veterinarios, “que actuaron de manera extraordinaria”.
“La PPA es más complicada que la clásica”
Marimon advierte que la PPA es más compleja que la variante clásica porque afecta a fauna salvaje, lo que implica movimientos de animales imposibles de controlar. Además, la población de jabalíes en Cataluña ha crecido de manera exponencial, por lo que señala que lo primero que debería hacerse es un “gran esfuerzo” para reducirla mediante “barra libre” para eliminarlos y cortar así el foco de infección. Aun así, reconoce que, por las informaciones que recibe, cree que “se está actuando correctamente” desde la declaración del brote.
El exconseller ha mantenido contacto por mensajes con el actual responsable, Òscar Ordeig. No le ha dado instrucciones, porque considera que está actuando bien, pero le recomienda insistir aún más en la captura de animales. Por eso apuesta por permitir el uso de jaulas de captura, un sistema que permite atrapar muchos ejemplares atraídos por comida.
Marimon también critica que la gente “interactúe” con la fauna salvaje. “Puede parecer simpático darles un trozo de bocadillo, pero es malo para el jabalí y para nosotros”. Pide que se respete a los animales y que se deje de alimentarlos, insistiendo en que Cataluña necesita reducir su número.
“Hace 30 años el mercado de exportación era limitado”
La semana ha cerrado con una caída de 20 céntimos en el precio del cerdo en la lonja de Mercolleida, lo que ha encendido las alarmas en el sector. Marimon explica que en 1994 no hubo una gran caída de mercado porque el precio del sacrificio estaba incluso en la banda alta tras retirar un millón de animales de las granjas.
Sin embargo, recuerda que en aquel momento el mercado exterior era “relativamente limitado”: se exportaba a Europa y al norte de África, pero no a países asiáticos, por lo que no hubo una gran afectación. Marimon considera que el ministro Planas “está trabajando bien” para no perder exportaciones, pero advierte que el cierre de determinados mercados supondrá pérdidas para los productores.
Por ello, cree que será necesario ayudarlos mediante alguna línea de apoyo “más o menos directa”, que no tiene por qué ser muy elevada al principio, pero sí suficiente para compensar a quienes se vean obligados a vaciar sus granjas si llegara a ser necesario.