La segunda ola de calor se instala en Tarragona: día tórrido, noche tropical

Tarragona se enfrenta a una nueva ola de calor que durará, al menos, hasta el martes 12 de agosto, según ha confirmado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Esta segunda ola del verano está dejando temperaturas extremas en gran parte del país, y aunque Tarragona no será una de las zonas más castigadas, sí se mantendrá en alerta por calor, especialmente durante el fin de semana y a comienzos de la próxima semana.

En la ciudad, se prevén máximas sostenidas entre los 31 y los 34 grados, acompañadas de mínimas que no bajarán de los 23 o 25, lo que aumentará la sensación de bochorno durante la noche. Esta situación complica el descanso y agrava el efecto conocido como “isla de calor urbana”.

El episodio coincide con la canícula, el periodo más cálido del verano, y aunque los registros no alcanzan los extremos de otras zonas del noreste peninsular o del interior del país —donde se esperan picos de entre 42 y 44 grados—, las autoridades locales insisten en la necesidad de extremar la precaución. 

Desde Protecció Civil y el Ayuntamiento de Tarragona se recuerda la importancia de hidratarse con frecuencia, evitar la exposición directa al sol en las horas centrales del día y prestar especial atención a colectivos vulnerables como mayores, menores y personas con enfermedades crónicas. También se pide vigilancia sobre quienes trabajan al aire libre.

El calor, además, tiene efectos tangibles sobre la salud pública. Según el Sistema de Monitorización de Mortalidad Diaria (MoMo), en lo que va de verano ya se han registrado más de 1.500 muertes atribuibles a las altas temperaturas en toda España, un 42 % más que en el mismo periodo del año anterior. Solo en lo que va de agosto, se contabilizan al menos 58 fallecimientos vinculados al calor, 47 de ellos desde el inicio de esta ola, el pasado domingo.

De cara al fin de semana, las previsiones apuntan a que las temperaturas seguirán subiendo ligeramente en el este peninsular. Aunque no se descartan tormentas secas para el viernes y sábado, la Aemet ha advertido que estas no traerán lluvias significativas y sí podrían ir acompañadas de rachas de viento y actividad eléctrica, lo que aumenta notablemente el riesgo de incendios.

Las temperaturas seguirán siendo muy elevadas al menos hasta el martes 12 de agosto. Después, y con un grado importante de incertidumbre, podrían empezar a descender de forma progresiva, especialmente en el tercio norte peninsular.