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Infraestructuras

La estación del Camp de Tarragona tendrá, por fin, parking low cost y seguridad

Generalitat, Diputació, La Secuita y Adif se comprometen a desbloquear los problemas de accesibilidad, movilidad y seguridad de la terminal de alta velocidad

Entrada de un convoy a la terminal de alta velocidad de Camp de Tarragona

Entrada de un convoy a la terminal de alta velocidad de Camp de TarragonaMarc Bosch

Núria Riu

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Paso decisivo para desbloquear los déficits de la estación de alta velocidad del Camp de Tarragona. Cuando esta infraestructura está a punto de cumplir veinte años desde su inauguración, este miércoles la Generalitat de Catalunya, la Diputació de Tarragona, el Ajuntament de la Secuita y Adif alcanzaban un acuerdo que puede calificarse como histórico, y que prevé los primeros resultados de forma «inmediata».

«No importa cómo hemos llegado hasta aquí, sino cómo trabajamos juntos para solucionarlo», apuntaba el conseller de Presidència, Albert Dalmau, tras el encuentro. Este ha sido el principal instigador de una cumbre de la que todo el mundo salió cargado de deberes, que ahora tendrán que materializarse.

La primera mejora afecta al aparcamiento. En este sentido, se decidió que Adif seguirá adelante con la construcción del aparcamiento que empezó a habilitar en los terrenos junto a la estación, y que quedó frenada cuando ya se había iniciado el movimiento de tierras.

El compromiso es que, en un plazo de unos quince días, puedan reiniciarse los trabajos para acondicionar esta superficie de forma provisional, con una capacidad para unos 110 vehículos. Este será de carácter gratuito y estará vigilado. Asimismo, se acordó que se incrementarán las patrullas de vigilancia de los Mossos.

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Según la previsión, en un mes los trabajos deberían estar acabados y a disposición de los usuarios, de forma que no tengan que estacionar en el vial de acceso, donde acostumbran a haber unos ochenta turismos.

La puesta en funcionamiento de esta superficie de emergencia debe permitir activar el segundo movimiento de piezas. Este pasa por señalizar, limpiar e instalar alumbrado público en el vial de acceso a la estación, donde los coches aparcan ahora. También se instalará un sistema de biondas que impida el estacionamiento.

De forma paralela, a nivel administrativo, se trabajará en la redacción de un convenio entre Adif y la Generalitat para traspasar a la administración autonómica la titularidad de este vial desde la rotonda de Perafort a la estación. El calendario que se ha fijado es el primer trimestre del año que viene.

Pendiente desde 2016

En otras circunstancias, este cambio de titularidad sería un acuerdo administrativo sin más. Sin embargo, en este caso es la clave para que pueda construirse el aparcamiento low cost que el Ajuntament de la Secuita persigue desde 2016 y que estaba bloqueado por la falta de esta glorieta, que determinará los accesos a la nueva superficie. Así, mientras la Generalitat se encarga de construir esta nueva rotonda provisional, la Diputació de Tarragona ofrecerá su asistencia técnica a la administración local para la redacción del plan de actuación específico, de forma que el proyecto pueda salvar los últimos escollos burocráticos.

El siguiente paso, un cajero automático y que se paguen los buses con tarjeta

La nueva zona de estacionamiento estará ubicada a unos 200 metros de la estación, en unos terrenos de 14.389 metros cuadrados, que son titularidad del Ajuntament desde 2017.

Tendrá una capacidad para unos 400 vehículos, e incluso podría ampliarse en el futuro. Así que, cuando la nueva superficie (que se gestionará mediante una concesión) esté abierta al público, Adif clausurará la suya, que habrá servido de forma provisional durante este tiempo.

Finalmente, el acuerdo que se alcanzó este miércoles también aborda la construcción del vial desde la carretera de El Pont d’Armentera (TP-2031) a la estación de Camp de Tarragona. Se trata de un enlace de 1,5 kilómetros de longitud que facilitará el acceso de todos los municipios del Baix Gaià e incluso de la zona del Penedès.

Este ya se diseñó en el momento de la entrada en funcionamiento de la estación, pero no ha llegado a ejecutarse. Inicialmente, la obra la tenía que asumir la Diputació de Tarragona, pero la carpeta fue traspasada a la Generalitat. Ahora, vuelve a recuperarse un proyecto que está acabado desde 2007 y las dos administraciones se han puesto de acuerdo en cofinanciarla a partes iguales, siendo el ente supramunicipal el que cogerá el liderazgo. Esto significa que será el servicio de carreteras de la Diputació el que se encargará de actualizar un proyecto que, en su momento, cifró la inversión aproximada en unos cuatro millones de euros.

Viñuales: «Es la estación de todo el territorio, pero sobre todo de Tarragona»

El alcalde de La Secuita, Eudald Roca, celebraba que «después de diecinueve años, se ha conseguido desbloquear en cinco minutos todos estos temas, en beneficio de la ciudadanía». Roca no podía esconder su satisfacción después de que, durante todo este tiempo, ha visto cómo las administraciones responsables habían hecho caso omiso de los déficits de una estación que cada año utilizan 1,4 millones de viajeros, siendo una de las principales puertas al territorio.

Tampoco podía esconder su satisfacción la presidenta de la Diputació de Tarragona, Noemí Llauradó, quien aseguró que el acuerdo ha sido posible en un momento en el que «todas las administraciones hemos trabajado de forma alineada para desbloquear la situación de una de las tres infraestructuras más importantes del territorio, junto con el aeropuerto de Reus y el Port de Tarragona». «Cuando hablamos de área metropolitana, es esto», añadía la presidenta del entre supramunicipal.

Una mesa de seguimiento

La reunión, que se celebró en el Palau de la Diputació, también acabó con el acuerdo de que, dentro de tres semanas, se hará un nuevo encuentro que, en este caso, será telemático, para hacer el seguimiento de los compromisos que se han adquirido. Entre estos, también destaca que en las próximas semanas está previsto que se instale un cajero automático en la estación, lo cual se está negociando desde la Generalitat con una entidad catalana. Esta era una de las demandas de los usuarios del autobús, ya que ahora tan solo puede pagarse en efectivo. No obstante, la administración autonómica también avanzó que se están dando los pasos para que el autobús también pueda pagarse con tarjeta.

Rubén Viñuales, vicepresidente de la Diputació de Tarragona y alcalde de la ciudad ha sido otro de los instigadores del acuerdo, que ha conseguido poner la estación de Camp de Tarragona en el centro. «Como alcalde de Tarragona, soy muy consciente de que es la estación del territorio, pero sobre todo de la ciudad, ya que más del 50% de los usuarios son de la ciudad, por tanto, mi función es velar por los intereses de Tarragona».

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