La red de manteros sigue activa en Salou y una marcha contra el 'racismo institucional' les apoya

La cita en Salou era este viernes 18 de julio a las 19.30 horas a las puertas del Ayuntamiento, en el paseo 30 de Octubre. Una convocatoria de manifestación para exigir el fin del "racismo y criminalización  de los trabajadores ambulantes (léase manteros)". 

Un llamamiento social para darle 'otra visión' al problema de Top manta: de comerciantes con productos ilegales a ojos de unos a "un problema de racismo institucional", según los convocantes de la protesta.

Decenas de personas se han dado cita en la sede consistorial, en el paseo 30 de Octubre. Dos pancartas presidían la convocatoria, bien colocadas en el suelo. Cada una con un mensaje: "Avui com ahir no passaran" y "No a la criminalización de la Migración".

Los participantes —entre los que había miembros de la comunidad senegalesa y de otras nacionalidades— han reivindicado que son personas pacíficas, que no son delincuentes, y han denunciado las dificultades para acceder a un empleo y regularizar su situación documental. 

También han lamentado los obstáculos para conseguir una vivienda, asegurando que muchos propietarios les rechazan por el color de su piel.

Tras este encuentro y con las 70 personas aproximadamente reunidas, se ha iniciado una marcha con las dos pancartas encabezando la manifestación. Aparte, algunos de los integrantes de la manifestación llevaban carteles con la misma idea.

En la otra punta de la ciudad

Mientras, en la otra punta de la ciudad, en la plaza Venus, la procesión del Top manta cobraba forma. 

En una esquina de esta plaza, decenas de bolsas verdes y negras apiladas y vigiladas. También alguna maleta con las costuras a punto de reventar. Los mercaderes aguardaban el momento del cambio de turno policial, de la ausencia de agentes en la frontera con Cambrils para iniciar la marcha. Ésta sin pancartas, género para vender y sábanas para protegerlas de la suciedad del paseo.

La procesión discurre este viernes como cada tarde-noche por este punto de paso de la Costa Daurada. Los manteros siguen su rutina. Intentan ganarse la vida y vender productos falsificados a los turistas y paseantes en un mercado ambulante a pie de playa. 

Ha habido controles policiales, intento de cerrar el paseo... nada ha servido para anular esta rutina de los vendedores ambulantes.

Parece que las actuaciones policiales contra el Top manta son historia de un pasado muy lejano (cuando hace escasas semanas que se llevaron a cabo con gran repercusión mediática). Han sido golpes inocuos a la maquinaria indestructible del Top manta y un esfuerzo de planificación y estrategia que solo parece tener cierto reconocimiento y admiración entre el papeleo judicial.

Y mientras la procesión de manteros avanza y se instala en el paseo del Cap Sant Pere, las instituciones ya no hablan del problema latente de cada verano en la Costa Daurada. 

Mejor dicho, solo hablan si hay reciben una palmada en la espalda. Sin ir más lejos, el Ayuntamiento de Salou se encargó de remarcar las felicitaciones recibidas por el alcalde Pere Granados por parte de ANDEMA, la asociación para la defensa de la marca, por la lucha contra la venta ambulante ilegal. 

Ha sido la única comunicación a la prensa del tema del Top manta estos últimos días, después de la alta tensión existente semanas atrás entre Ayuntamiento de Salou y los Mossos por las últimas actuaciones policiales en plena campaña vacacional.

Desde Cambrils, también se han silenciado sus reiteradas quejas a su 'vecino' por permitir a los manteros tener su almacén de artículos que luego se empaquetan para iniciar la ruta cada día. 

El problema sigue allí, latente. También la vigilancia policial permanece por sus turnos, pero la lucha contra el Top manta ahora ya no vende (sin doble sentido) ... hasta la próxima actuación policial.