Tribunales
Cárcel confirmada para un joven que atracó un Caprabo de El Vendrell con un subufusil y amenazó al personal
La Audiencia Provincial de Tarragona ratifica que el sospechoso permanecerá en prisión mientras continúa la investigación, tras valorar la existencia de indicios sólidos sobre su participación en distintos asaltos, el riesgo de fuga, la posibilidad de que se destruyan pruebas y su vinculación con otros delitos cometidos recientemente en la zona

El establecimiento atracado.
Un joven de 26 años seguirá en prisión provisional comunicada y sin fianza después de que la Audiencia Provincial de Tarragona confirmara la medida cautelar, desestimando el recurso presentado por su defensa. La decisión judicial se basa en la gravedad de los hechos y en los numerosos indicios que vinculan al sospechoso con un robo violento ocurrido el 18 de julio de 2024 en un supermercado de El Vendrell.
Según consta en la investigación, el asalto fue llevado a cabo por un grupo de tres personas que actuó de manera coordinada. Mientras uno esperaba fuera junto a un vehículo, los otros dos ingresaron al local con el rostro cubierto, guantes y armados con un subufusil, intimidando a los empleados y apropiándose del dinero de la caja, unos 860 euros.
Tras el robo, los autores huyeron en un coche con la matrícula tapada, un detalle que permitió a los investigadores rastrear sus movimientos. Apenas unos minutos después, un testigo en la localidad de Santa Oliva observó a dos hombres manipulando la placa del vehículo y alertó a la policía, lo que permitió seguir la pista de los sospechosos.
La mañana siguiente, los Mossos localizaron un vehículo con las mismas características mal estacionado. Al acercarse al coche, una mujer se encontraba dentro, y al ser preguntada por el conductor logró huir junto a él, simulando que iba a buscarlo. Posteriormente, los agentes identificaron a los sospechosos gracias a la descripción facilitada por testigos y procedieron a realizar un registro.
Aunque no se encontraron las llaves del coche, dentro del vehículo se hallaron huellas en la ventanilla del conductor que coincidían con uno de los investigados, un guante de plástico con diseño distintivo, un par de zapatillas blancas, un jersey gris claro, munición de 9 mm compatible con el subfusil utilizado en el robo y un tique de compra que permitía rastrear movimientos recientes del vehículo.
Además, el análisis de las comunicaciones telefónicas aportó información clave: el número de teléfono del sospechoso se encontraba en la zona del robo durante los hechos, se registraron llamadas con familiares y conocidos, y coincidencias con otros teléfonos usados en recargas y contactos con personas vinculadas al caso. Todos estos elementos, combinados con los indicios materiales, permitieron a los investigadores reconstruir la secuencia de los hechos y fortalecer la imputación del joven en el robo.
En conjunto, las pruebas provisionales fueron consideradas suficientes para justificar la prisión provisional, al reflejar tanto la participación directa en el robo como el riesgo de que los investigados puedan alterar o destruir pruebas, reforzando así la necesidad de mantener al sospechoso bajo custodia mientras continúa la investigación.
El tribunal también ha tenido en cuenta que el sospechoso está siendo investigado por otros robos cometidos en la zona, lo que evidencia un riesgo de reiteración delictiva, incluso sin antecedentes penales previos.
La Audiencia subrayó que existe un riesgo de fuga real, ya que el joven carece de arraigo laboral y profesional: según los registros, solo trabajó 33 días durante 2025 y no ha tenido empleo estable desde 2018. Además, la residencia habitual del sospechoso no se ha podido comprobar con certeza, lo que refuerza la decisión de mantenerlo bajo custodia.
Otro factor clave que justificó la prisión provisional es la posibilidad de destrucción o alteración de pruebas, dado que el arma utilizada en el robo aún no ha sido localizada. Esto hace que los jueces consideren imprescindible que el joven permanezca en prisión para garantizar la integridad del proceso.
El caso no se limita a este único robo. La investigación policial ya había identificado a un segundo implicado, de 32 años, que permanece en prisión por varios atracos en farmacias, gasolineras y comercios del Garraf. La coordinación entre los autores y la violencia empleada en los ataques han obligado a los Mossos d’Esquadra a realizar un seguimiento exhaustivo, combinando registro de vehículos, análisis de huellas, revisión de imágenes de seguridad y control de comunicaciones telefónicas.
Con la confirmación de la prisión provisional, el joven seguirá bajo custodia mientras se completa la instrucción de la causa y se prepara el juicio por robo con violencia e intimidación.