Tráfico
Altafulla instalará radares de control de la velocidad en dos de sus carreteras
Lo que se recaude mediante estos dispositivos se destinará a mejoras en la vía pública. La previsión es que se coloquen también otras cámaras en diferentes puntos del municipio como las de lectura de matrícula en la calle de Dalt

La colocación del radar de la calle Marquès de Tamarit en dirección Torredembarra.
El Ayuntamiento de Altafulla pondrá en marcha próximamente dos radares con el objetivo de garantizar una movilidad más segura y sostenible dentro del municipio. Uno de los dispositivos se instalará en la calle Marquès de Tamarit (antigua carretera N-340), que conecta Torredembarra con Altafulla y concentra un flujo muy elevado de vehículos, y el otro en la Ronda de Altafulla, cerca del cruce con la calle Cadernera.
La calle Marquès de Tamarit es un eje viario fundamental, especialmente durante los meses de verano, cuando los núcleos de la zona reciben un importante volumen de población estacional y a cantidad de tráfico se multiplica. Según estimaciones del Instituto Nacional de Estadística, Altafulla —con un censo de 5.838 habitantes— llega a acoger cerca de 98.000 turistas acumulados a lo largo de la temporada alta, una cifra que representa un reto importante en materia de movilidad y seguridad viaria.
Esta presión comporta un incremento de circulación en vías como esta carretera, incluyendo ciclistas y peatones que conviven con coches y motocicletas. Teniendo en cuenta que se trata de un vial prácticamente recto y con tramos largos sin obstáculos, resulta imprescindible limitar la velocidad de los vehículos para proteger los vecinos y a la vez fomentar el uso de opciones de desplazamiento más sostenibles y saludables, tal como especifica el Ayuntamiento.
El mismo sucede con la Ronda de Altafulla, una vía en una zona residencial y familiar por donde conviven un grueso significativo de peatones y medios de transporte. El Ayuntamiento de Altafulla también quiere reducir la velocidad a la que circulan los vehículos en este punto.
La introducción de estos radares complementa otras actuaciones implantadas durante los últimos años, como las bandas reductoras de velocidad, la mejora de la señalización horizontal y vertical y el repintado de pasos de peatones para hacerlos más visibles.
Ambos dispositivos empezarán a funcionar próximamente y la recaudación de los radares se destinará íntegramente a reforzar la seguridad y a financiar nuevas mejoras en el espacio público del municipio. La empresa encargada de los trabajos es Alphanet Security Systems SL, la compañía que ganó el concurso público el pasado mas de septiembre del contrato de concesión de servicios de instalación, asistencia técnica y colaboración del control de seguridad viaria para la instalación de equipos de control de velocidad y control de acceso al Ayuntamiento de Altafulla. La previsión es que se instalen otras cámaras en diferentes puntos del municipio como las de lectura de matrícula en la calle de Dalt.
El incivismo
Aun así, la seguridad no es el único objetivo que se persigue con estos dispositivos. También se quiere promover un modelo de movilidad más sostenible y respetuoso con el entorno, en línea con el plan estratégico que se desarrolla desde hace años.
Este plan ha permitido integrar sistemas de seguridad que protegen la privacidad de los ciudadanos y, al mismo tiempo, facilitan la detección y persecución de conductas incívicas e infracciones que pueden poner en riesgo la convivencia y el bienestar de la comunidad, especifica el consistorio.