El desvalijo más inverosímil en una casa de Torredembarra

La Policía Local de Torredembarra detuvo este Martes Santo en la calle Magdalena de la ciudad a dos jóvenes de 22 y 23 años respectivamente acusados de la autoría de un robo con fuerza. Ambos habían entrado en una vivienda de esa calle y la habían desvalijado literalmente. Dinero y objetos de valor no llevaban encima, pero se hicieron con todo lo que encontraron a su paso: cepillos de dientes, pilas, cordones cargadores eléctricos, un bote de insecticida, un costurero de regalo, tornillos, una bombilla sábanas por estrenar, una cajetilla de chinchetas...

La interceptación de los dos presuntos delincuentes, uno vecino de Torredembarra y el otro de Tarragona, empezó por una llamada vecinal de la calle Tràngol. Una alarma de una comunidad avisaba de intrusos en la zona comunitaria y uno de los residentes informaba a la Policía Local de lo sucedido.

La patrulla del turno de noche se acercaba a la dirección poco antes de las 5 de la madrugada y hablaba con el testigo. Éste facilitó información de los hombres que estarían dentro de la propiedad privada, que en un primer vistazo no tenía ni desperfectos ni evidencias de haberse perpetrado un robo.

La patrulla hizo una batida por la zona y en la esquina de la avenida Galera con la calle Magdalena vio a dos jóvenes que podrían encajar con la descripción del testigo.

Tras identificar a los dos viandantes, se les registró lo que llevaban y se encontró en una bolsa todo el botín variopinto y una libreta de ahorros con dos nombres que no encajaban con los sujetos. Las gestiones realizadas permitieron relacionar la propiedad de los objetos con una vivienda cuya puerta estaba forzada y tenía relación con los titulares del documento bancario.

Ante las evidencias, los dos jóvenes fueron detenidos y acusados de la presunta autoría de un delito de robo con fuerza.