El 'tarraconense' Adrià Plazas se niega a firmar y seguirá retenido en Israel tras el asalto a la Flotilla

El doctorando de la Universitat Rovira i Virgili (URV) de Tarragona y miembro del secretariado nacional de la CUP, Adrià Plazas, permanecerá retenido en Israel tras negarse a firmar la orden de deportación inmediata que el Gobierno israelí exige como condición para liberar a los activistas de la Flotilla de la Libertad Global Sumud, interceptada esta semana por el ejército israelí en aguas internacionales cuando se dirigía a Gaza.

Entre los 49 ciudadanos españoles detenidos y retenidos en el desierto del Negev, el Ministerio de Asuntos Exteriores español confirmó este domingo que 21 serán deportados a España, entre ellos la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau y el concejal de ERC Jordi Coronas. El ministro José Manuel Albares explicó en una entrevista en TVE que se ha alcanzado un acuerdo con las autoridades israelíes “para garantizar la repatriación inmediata de aquellos activistas que han aceptado las condiciones establecidas por Israel”. Los deportados tienen previsto tomar un vuelo desde Tel Aviv esta tarde y llegar al aeropuerto de Barajas hacia las ocho de la noche.

Fuentes de la CUP confirmaron que Plazas y la diputada de la formación, Pilar Castillejo, han rechazado firmar el documento de deportación, alegando que hacerlo supondría admitir que entraron ilegalmente en Israel. En un comunicado difundido por el partido, se afirma que ambos “han decidido seguir ejerciendo presión internacional desde la prisión de Ketziot”, al sur del país, donde continúan recluidos junto a otros activistas extranjeros.

La Universitat Rovira i Virgili ha expresado públicamente su “solidaridad y apoyo absoluto” a Plazas. El rector, Josep Pallarès, ha exigido esta semana su liberación inmediata y ha reclamado al Gobierno español que “redoble sus esfuerzos diplomáticos para garantizar que se respeten los derechos humanos y jurídicos del investigador”.

Plazas, de 30 años y natural de Girona, es doctorando en el Programa de Nanociencia, Materiales e Ingeniería Química de la URV. Además de su militancia en la CUP, participaba en la flotilla en calidad de observador civil y activista por los derechos del pueblo palestino.

La Flotilla Global Sumud —una iniciativa internacional con embarcaciones procedentes de Barcelona, Catania y Túnez, entre otros puertos— zarpó el pasado 28 de septiembre con el objetivo de romper el bloqueo israelí sobre Gaza y entregar ayuda humanitaria. Israel interceptó la flotilla en aguas internacionales el pasado miércoles, trasladando a todos sus tripulantes a centros de detención en el desierto del Negev. Según relató Ada Colau a El País, el ejército israelí llegó a desplegar “un submarino muy cerca de las embarcaciones, provocando cortes de comunicación y un ambiente de intimidación”.

Fuentes diplomáticas españolas han confirmado que el consulado en Tel Aviv mantiene contacto directo con todos los activistas españoles aún detenidos, incluidos Plazas y Castillejo, y que se están ofreciendo “asistencia consular completa” y mediación legal.

El eurodiputado de los Comuns Jaume Asens ha hecho un llamamiento a recibir a los activistas deportados a su llegada al aeropuerto de Barajas esta noche, y ha exigido al Gobierno español que “no dé por cerrado el caso mientras haya españoles retenidos en cárceles israelíes por motivos políticos”.

Mientras tanto, los abogados de la defensa de la Flotilla Global Sumud en Tel Aviv han anunciado que presentarán un recurso ante la justicia israelí para revisar la situación de los activistas que han rehusado ser deportados. De momento, el Ministerio de Exteriores español mantiene abierta la vía diplomática con Israel para lograr la repatriación de los 28 españoles que continúan bajo custodia.