Los jugadores de Torredembarra Guillem Panadès y Biel Rius ya están de camino a Málaga para participar en su primera convocatoria con la Selección Española sub-20 de Fútbol Playa. Fue el mismo seleccionador Christian Méndez, técnico de la Absoluta, quien les comunicó la gran noticia hace algunos días. Los dos torrenses llevan dos años trabajando bajo la metodología de la Llorenç Gómez Academy. Este miércoles se han unido a los otros 20 jugadores, procedente de diferentes puntos del país, para una convocatoria que durará hasta el sábado 23 de marzo.
Guillem Panadès recuerda que se sentó con Llorenç hace dos años para establecer objetivos de futuro. Y esta convocatoria era, sin duda alguna, una de las principales metas a corto plazo. Se siente “realmente afortunado y agradecido por la oportunidad”. Quiere que el seleccionador vea en él todo el trabajo que hay detrás y, a pesar de su gran humildad, está convencido que “haré todo lo posible para sacar a relucir todos los conceptos que he aprendido a lo largo de todos estos meses y el jugador completo por el que lucho ser día tras día”. Y es que su voluntad no es otra que la de “seguir trabajando, mejorando y evolucionando para dar el salto a la Selección Absoluta, asentarme y construir una larga carrera”.
Un sueño que comparte su compañero y amigo Biel Rius, quien también espera hacerse un sitio bajo los palos de la ‘Roja’. Ansía la llegada del debut, donde espera demostrar todo lo que es capaz de hacer. Apunta a “un portero muy completo en todos los ámbitos del juego, tanto técnicos como tácticos y mentales”. Se muestra muy agradecido por la convocatoria y muy consciente de que “esto acaba de empezar y hay que seguir trabajando duro”.
Para Llorenç, su míster y su guía dentro y fuera del campo, todo son palabras bonitas. Lo describen como una de las mejores personas que se han cruzado en la vida, “un apoyo y una ayuda incondicional con la que siempre podemos contar”.
Su romance con el fútbol playa se remonta al Torneo Local de Fútbol Playa de Torredembarra. Una cita ineludible desde que eran unos niños y que disfrutaban juntos cada verano. Un año Llorenç les propuso bajar a entrenar con él a la arena y desde ese día no ha habido nada ni nadie que los pare. Ambos reconocen que “entrar en la Llorenç Gómez Academy es la mejor decisión que podíamos haber tomado”. “Y es que sin Llorenç a nuestro lado -añaden- hoy no estaríamos donde estamos”. También agradecen la labor de sus compañeros ya que insisten en que “cada uno de nosotros somos clave para la evolución del otro”. También destacan “la profesionalidad en cada aspecto que trabajamos y el hecho de que cada minuto de trabajo tenga un sentido enorme para que sigamos evolucionando”.
