Tras conseguir la mínima olímpica en 2020 y estar preparándose durante más de un año, ya cada vez falta menos para que Marta Galimany cumpla su sueño de competir en unos Juegos Olímpicos. La atleta llegó el pasado sábado a la ciudad japonesa de Sapporo, lugar donde se celebrará la prueba de maratón, y asegura que ya está “instalada, adaptada al horario y centrada en el objetivo”.
Després d’un viatge llarg amb una visita fugaç a la vila olímpica ja estem instal•lats a #Sapporo, adaptats a l’horari i centrats en l’objectiu ����
Quines ganes de marató olímpica! ��
�� @jordi_toda @atletismoRFEA @COE_es #Tokyo2020 pic.twitter.com/TBBaXu0Fqf— Marta Galimany (@marta_galimany) August 1, 2021
El pasado miércoles 28 de julio la de Valls salió de la estación del Camp de Tarragona en dirección a Madrid, donde pasó una noche antes de coger el vuelo a Tokio. “Llegamos al mediodía a Frankfurt, donde hacíamos escala, pero para mí ya era como si fuera de noche. Cuando cogimos el avión para Tokio tuve tres asientos, por lo que me acomodé y me puse a dormir”, explica la atleta. Marta asegura que el momento de más nervios y más tensión fue cuando llegó al aeropuerto de Tokio, “porque debíamos pasar todos una PCR y era importante que todo el mundo fuera negativo. Si alguien salía positivo, nos hubieran confinado y tendríamos que haber estado en cuarentena”.
Después de arreglar todos los trámites de visado, la organización de los Juegos llevó a Marta y los demás atletas a la villa olímpica de Tokio: “Tuvimos la oportunidad de visitar y de pasar una noche en la villa, donde coincidimos con todos los deportistas. Fue una noche muy especial por eso, por haber visto todo el movimiento olímpico, a la gente de todos los deportes allí reunida, fue muy bonito”. Allí Marta pudo realizar un pequeño entrenamiento, “para activar un poco las piernas después del viaje”, asegura.
La vallense llegó el sábado 31 a la ciudad japonesa de Sapporo, situada a 1000km al norte de Tokio. Allí pudo conocer las instalaciones que disponen los atletas para entrenar, y según explica, “es un sitio cerrado, estamos en una especie de burbuja. Ningún japonés externo a los Juegos puede acceder a nosotros ni nosotros podemos interactuar con ningún japonés que no esté en la organización. Vamos del hotel a entrenar, no tenemos más movilidad que esta”. Ahora, Marta se preparará junto a su pareja y entrenador para estar en las mejores condiciones posibles para el maratón, que tendrá lugar este viernes a partir de las 12 de la noche.