AVE: más incógnitas que certezas

La mirada ganxeta. La llegada del AVE al Aeropuerto y su futura estación se han anunciado sin un modelo claro y generando un lío mayúsculo 

09 agosto 2021 07:22 | Actualizado a 09 agosto 2021 07:28
Se lee en minutos
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

L a noticia del verano». Así definía el alcalde Carles Pellicer el acuerdo entre la Generalitat y el Gobierno Central que prevé conectar el AVE con el Aeropuerto de Reus y construir una nueva estación. Sin duda, un anuncio esperado desde hace mucho tiempo para la mejora en la competitividad y movilidad del territorio. Pero a pesar de la buena noticia creo que todavía deberíamos aparcar las celebraciones. Permítanme que me sitúe en el lado pesimista en toda esta historia. A día de hoy, los interrogantes siguen siendo muy superiores a las certezas. Y los antecedentes no son demasiado halagüeños. Mal empezamos, además, cuando el proyecto inicial ya ha obligado a cambiar el discurso.

Del anuncio inicial del Govern de querer conectar los aeropuerto de Reus y El Prat a través de la alta velocidad se ha pasado a priorizar la conexión con el centro de Barcelona. Particulamente, pienso que esta segunda opción es la que cobra más sentido y la que necesitamos como territorio. Tanto para un grupo importante de los turistas que llegan al aeródromo reusense como para los ciudadanos que residimos en la demarcación. 

También la estación ha generado mensajes confusos. Desde recuperar la Estación Intermodal a una infraestructura complementaria o algunas otras opciones. Finalmente, lo que parece descartado es recuperar el proyecto de hace ya más de 10 años de la Intermodal.

Las indefiniciones también se han cobrado un sin sentido de declaraciones y posicionamientos cambiantes. Un lío mayúsculo en pleno verano que, seguro, tendrá muchos más capítulos. 

Tampoco hay que olvidar que todo depende de lo que acuerden  Generalitat y Gobierno Central (también la UE por el tema medioambiental). Y no sería la primera vez que desavenencias de última hora o cambios de escenario político dieran al traste promesas en materia de movilidad. 
Llegados a este punto, creo que lo más preocupante es la percepción de que no existe un modelo claro en materia de movilidad. Y para que la llegada del AVE al Aeropuerto de Reus y su futura estación sean positivas esto debe ser la prioridad. 

Lo más lógico, así lo defienden los expertos, sería decantarse por un modelo londinense que tiene a Heathrow como gran hub y cinco aeropuertos complementarios (Gatwick, Stansted, Luton, Southend y City). Aunque, en nuestro caso, la llegada del bajo coste a El Prat ya desvirtuó este modelo que ahora debería reconducirse. También sería un buen momento para que la Generalitat, en línea con lo que defiende la Taula Estratègia, reclamara el traspaso de la gestión aeroportuaria. Por todo ello, se me antoja esencial la capacidad de liderazgo y capacidad de influencia que se logre aplicar desde la demarcación.

Y hasta entonces, ¿qué?

A la espera de que todo termine siendo una realidad, el escenario que tenemos por delante será largo y los viajeros necesitan soluciones a nuestro día a día. Invertir en la maltrecha red ferroviaria de cercanías o apostar por el bus interurbano no sería mala idea. 

Comentarios
Multimedia Diari