Mémora prevé acaparar la mitad de los servicios con el estreno de su tanatorio
Según la empresa, cada año se realizan cerca de un millar de sepelios en Reus. La previsión de la funeraria es inaugurar las instalaciones en el mes de octubre

Los operarios trabajando en la sala que se utilizará como oratorio, para celebrar ceremonias.
Las obras del tanatorio de la empresa funeraria Grupo Mémora avanzan a buen ritmo. Según el calendario, los trabajos concluirán a mitad de septiembre para que a principios de octubre ya funcionen las instalaciones. Con el estreno del tanatorio, Grupo Mémora se ha propuesto ampliar su actual cuota de mercado y acaparar la mitad de los servicios funerarios que se realizan en Reus. José Antonio Álvarez, gerente del área de Tarragona de la empresa funeraria, asegura que «cada año en la ciudad se realizan cerca de un millar de servicios, nuestra idea es alcanzar la mitad de los sepelios». Según los últimos datos publicados en el Idescat, correspondientes al año 2014, en la capital del Baix Camp se registraron un total de 866 defunciones, y en el conjunto de la comarca la cifra ascendió a 1.445.
Actualmente los servicios que realiza la empresa funeraria privada son a través del alquiler de las instalaciones de la funeraria municipal, Serveis Funeraris Reus i Baix Camp. Según indica el gerente del área de Tarragona de Mémora «poco a poco estamos ganando cuota de mercado pero no con la intensidad que implica tener una instalación propia».
Él mismo asegura que cuando se inaugure el tanatorio de Mémora, que estará ubicado en la antigua sede de STS Grup, en el Tecnoparc, la «gente entenderá mejor que puede escoger entre nuestros servicios funerarios o los de la empresa municipal».
Sobre la posibilidad de ajustar el coste del servicio funerario, José Antonio Álvarez no cierra la puerta a esta intención, teniendo en cuenta que, según asegura, «hoy tenemos unos costes por el alquiler de salas del tanatorio municipal que a partir de otoño dejaremos de tener». En cualquiera de los casos, el precio final dependerá de la contratación de los servicios complementarios. «Nosotros no hemos entrado en Reus con la vocación de ser más caros o más baratos, sino con la intención de ofrecer el mejor servicio», añade el gerente del área de Tarragona de Mémora. Él mismo asegura que tras la llegada de la empresa a la ciudad, los primeros servicios que realizaban estaban más ligados a las compañías de seguros, en cambio ahora las contrataciones son más de carácter privado.
La apertura del tanatorio en el Tecnoparc no supondrá una ampliación de la plantilla. Actualmente en la demarcación unas 20 personas trabajan para el operador funerario privado.
Las instalaciones
La empresa funeraria Grupo Mémora invertirá cerca de 1 millón de euros en la remodelación de la antigua sede de STS Grup. En la planta baja del edificio se ubicará el departamento de administración, además del oratorio que albergará las ceremonias, ya sean civiles o religiosas.
En la primera planta se está trabajando en la construcción de las 3 salas de velatorio, dos de las cuales estarán separadas por una pared móvil. «En casos en los que una defunción lo requiera, un mismo servicio podrá ocupar ambas salas», detalla José Antonio Álvarez, quien no descarta ampliar la cifra de salas en la segunda planta si el aumento de los servicios lo requiere, y donde también se ubicarán más servicios administrativos.
Una de las novedades es que las instalaciones incorporaran una sala en la que los familiares podrán despedirse por última vez del difunto. «En esta sala los familiares podrán ver, antes de introducir al difunto en el túmulo, como los profesionales en tanatopraxia han dispuesto al difunto y posteriormente, antes de la ceremonia, la familia podrá disponer de un tiempo para despedirse», explica el gerente del área de Tarragona de la empresa funeraria, quien añade que los clientes también dispondrán de un parking privado en el edificio.
En el exterior del futuro tanatorio de Mémora, también se trabaja para construir una escalera de evacuación, cuyo diseño se integrará en el edificio. «Será una escalera de caracol, revestida y con luces led, un elemento que dará singularidad al edificio», concluye el gerente.