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Las cuatro muertes violentas de Tarragona: de la mujer en el maletero al hombre desangrado en Reus

Estas muertes violentas de 2025 excluyen a los conductores detenidos en la provincia que han sido acusados de homicidios por imprudencia y al padre que se 'olvidó' a su hijo en Valls y murió de un golpe de calor hace unas semanas

Mossos investiga las conexiones entre víctima y detenida en Reus.

Mossos investiga las conexiones entre víctima y detenida en Reus.Alfredo González

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La muerte de un joven de 27 años esta madrugada de lunes, 14 de julio, en la calle Amargura de Reus se ha convertido en el cuarto homicidio que registra la provincia de Tarragona en este 2025. 

La víctima ha muerto desangrada en esta calle de la capital del Baix Camp tras sufrir varias heridas con arma blanca que han terminado causándole la muerte. El SEM ha intentado mantenerlo con vida, pero se ha certificado la muerte poco después.

El crimen está bajo secreto policial y de momento se desconoce el motivo por el que la mujer de 31 años habría atacado a la víctima, de 27. Aunque se ha especulado que el crimen tendría su originen  en una pelea por un problema de tráfico, fuentes de la investigación han desactivado esta hipótesis a medida que han conocido más datos.

 Antes de este crimen, la provincia ha registrado otros tres casos, siendo el primero la aparición de un cadáver en un parque de Tortosa. Los hechos se conocían el 8 de febrero.

Los Mossos d’Esquadra abrieron una investigación a raíz de la muerte violenta de un joven de 25 años cuyo cuerpo fue hallado en las inmediaciones del Castell de la Suda, en Tortosa (Baix Ebre). El cadáver, que presentaba signos evidentes de violencia, fue localizado en una zona de difícil acceso.

La víctima residía en Mas de Barberans. Según fuentes próximas a la investigación, el joven había sido dado por desaparecido semanas antes por su entorno familiar. Esteban padecía problemas de salud mental, aunque de momento no se ha establecido un vínculo entre esa circunstancia y el crimen.

La autopsia confirmó que la causa de la muerte fue una agresión con arma blanca, lo que activó el protocolo por homicidio. El cuerpo también presentaba diversas contusiones compatibles con una agresión violenta.

Hasta el momento, no se han practicado detenciones y los investigadores trabajan con varias hipótesis abiertas.

Apuñalado en Roda de Berà en abril

La segunda muerte violenta también tuvo como un arma blanca como epicentro de la investigación. Un hombre murió apuñalado en Roda de Berà el 12 de abril.

Los Mossos d’Esquadra asumieron la investigación de la muerte violenta de un hombre de 50 años que fue hallado sin vida en el paseo marítimo de La Barquera, en Roda de Berà

Pocas horas después del crimen, los investigadores identificaron y detuvieron a cuatro jóvenes —de entre 20 y 22 años— en El Vendrell. Según fuentes policiales, los presuntos agresores huyeron en grupo tras el ataque, y algunos de ellos fueron localizados gracias a imágenes de videovigilancia.

El conductor y el cadáver en el maletero en Constantí

El tercer crimen registrado en la provincia fue en Semana Santa, el 19 de abril. Un hombre de 43 años fue detenido en la autopista AP-7, a la altura de Constantí, después de detener su vehículo y confesar a una patrulla de los Mossos d’Esquadra que transportaba el cuerpo sin vida de su pareja en el maletero del coche. La mujer, de 44 años, presentaba signos evidentes de violencia.

Primer crimen machista de la provincia

La víctima, vecina de Calafell (Tarragona), mantenía una relación sentimental con el detenido, con quien compartía domicilio en la urbanización Valldemar de Segur de Calafell, junto a su hijo menor. La policía investiga si el crimen se cometió durante una estancia en Castellón, donde la pareja pasó las vacaciones de Semana Santa. 

El Ministerio de Igualdad confirmó que se trataba de un caso de violencia machista, el noveno de España en aquella fecha y el segundo registrado en Catalunya hasta entonces. La víctima no había presentado denuncias previas por maltrato, según fuentes oficiales.

Además de estos cuatro crímenes, en la provincia de Tarragona se ha acusado y detenido a varios conductores por accidentes o atropellos mortales, el último este pasado fin de semana en l'Arboç.

Y finalmente el caso que todavía está pendiente de decisión judicial es la muerte de un niño de 2 años y medio en Valls. El menor murió por un golpe de calor al estar encerrado 5 horas dentro del coche de su padre, que se 'olvidó' de él en una calle del polígono industrial de la capital del Alt Camp.

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