Tarragona pide a la Generalitat una facultad de Farmàcia

La demarcación de Tarragona lleva tres años trabajando para que en la Universitat Rovira i Virgili (URV) pueda cursarse el grado de Farmàcia. Se trata de una reivindicación histórica, que hoy en día tiene más sentido que nunca, debido a la falta creciente de farmacéuticos formados y cualificados en la provincia. El proyecto se encuentra ahora encima de la mesa de la Generalitat de Catalunya, organismo que tendrá la última palabra en este asunto.

Por eso, el Col·legi Oficial de Farmacèutics de Tarragona (COFT), con el apoyo de la URV, de los Ayuntamientos de Tarragona y Reus, de las Cambres de Comerç del territorio y de la Diputación de Tarragona, presentó hace unas semanas un informe a la consellera de Recerca i Universitats, Núria Montserrat, durante una visita a la ciudad.

El estudio apoya la necesidad urgente de crear un grado de Farmàcia en la URV, alegando que la falta de farmacéuticos está generando graves dificultades para cubrir vacantes. «Esto repercute directamente en la calidad de la atención sanitaria y la seguridad de los pacientes», explica el presidente del COFT, Toni Veciana Nogués.

Hoy en día, las farmacias no solo cumplen con su función principal de dispensar medicamentos. También actúan como punto de acceso primario al sistema sanitario, ofreciendo consejos sobre salud o el seguimiento de los tratamientos. «De hecho, hay pueblos muy pequeños que solo tienen el farmacéutico como referente sanitario», apunta Veciana.

La realidad es que encontrar un farmacéutico no resulta ser tarea fácil. Según el estudio que el COFTpresentó a la Generalitat, un 87% de las farmacias del territorio no han podido cubrir las vacantes.El 13% dice que sí que lo ha hecho, pero con dificultades. Además se prevé que el 64% de las farmacias encuestadas necesitará de un farmacéutico durante el próximo año. El 75% en los próximos dos años.

Según datos del Consejo General de Farmacéuticos de España, en el año 2022, Tarragona era la provincia catalana con menos farmacéuticos por habitante. Teníamos 112 profesionales por cada 100.000 habitantes, mientras que la media en España era de 167. Barcelona 161, Girona 122 y Lleida 119. Unos datos que dejan en evidencia la necesidad de formar profesionales en el territorio.

Ahora hay que ir Barcelona

Los estudiantes que quieren cursar el grado de Farmàcia en Catalunya solo tienen dos opciones, las dos ubicadas en Barcelona. Por una parte, en la Universitat de Barcelona (UB), que es pública, y la Ramon Llull (URL), que es privada.

Según datos de la URV, el grado de Farmàcia es el cuarto más demandado y el primero en plazas públicas. Para hacernos una idea, en el curso 2022-2023 se ofertaron 415 plazas –340 en la pública y el resto en la privada–, y hubo 543 estudiantes que escogieron Farmàcia como primera opción.

La demanda actual de estudiantes en la provincia de Tarragona es de entre 25 y 35 estudiantes. «Imaginaros la demanda que tendríamos si se pudiera cursar en Tarragona. Pensar que hay muchas familias que no pueden permitirse económicamente que sus hijos vayan a estudiar a Barcelona», explica Veciana, quien añade que «además, también seríamos atractivos para otras ciudades, como Lleida, Castellón, Zaragoza, Teruel o Huesca, por ejemplo».

La URV tiene infraestructura

El COFT y la URV llevan años trabajando en el tema. «No pretendemos que se haga una facultad nueva de Farmàcia. Lo que queremos es que se pueda cursar el grado de Farmàcia en la URV», dice Veciana. Por el momento se descarta construir un edificio nuevo y la apuesta es aprovechar las instalaciones de la facultad de Medicina, en el Campus Bellissens de Reus, y la de Química, en el Campus Sescelades de Tarragona. Se trata de uno de los puntos fuertes del proyecto, ya que la URV cuenta con las infraestructuras necesarias –como por ejemplo, laboratorios– para la formación de farmacéuticos.

Farmàcia es uno de los pocos grados que se cursan en cinco años y 300 créditos, como Medicina. Todavía no está claro qué cursos se harán en una facultad y en la otra. «Lo que está claro es que aprovecharemos recursos y, además, aportaríamos riqueza y talento, tanto a Reus como a Tarragona», dice el presidente del COFT.

Por su parte, el rector de la Universitat Rovira i Virgili (URV), Josep Pallarès, confirma que la universidad dispone de capacidad para impartir estos estudios.

Tal como se detalla en el informe remitido a la Generalitat, la URV ya ofrece docencia en ámbitos como Medicina, Nutrición Humana y Dietética, Química, Bioquímica, Biología Molecular y Biotecnología. Esto garantiza, entre otros aspectos, que la universidad cuente ya con aulas y laboratorios especializados donde impartir el grado de Farmacia. Dispone, además, de unidades docentes en distintos hospitales, así como de una treintena de grupos de investigación consolidados en biomedicina y química.

Todo este ecosistema asegura que los futuros estudiantes del grado dispongan de espacios adecuados para realizar prácticas externas, tanto en farmacias comunitarias y hospitalarias como en la industria farmacéutica.

En cuanto a la docencia, el estudio calcula que sería necesario contar con un mínimo de 14 profesores, de los cuales 11 serían a tiempo completo. A ellos se sumarían tres técnicos de administración y gestión, con un coste anual aproximado de un millón de euros. El proyecto total representaría para las arcas públicas una inyección de 1,35 millones de euros anuales, teniendo en cuenta el mantenimiento del equipamiento.

Paralelamente al informe presentado, la universidad trabaja ya en el plan de estudios, dado que el Grado en Farmacia tendrá una duración de cinco años y 300 créditos ECTS.

El rector Pallarès subraya que cada año entre 25 y 35 estudiantes de la demarcación solicitan estos estudios en primera opción. La creación de nuevas plazas en la URV permitiría que estas fueran de carácter público, evitando que los alumnos deban recurrir a universidades privadas, una opción no siempre accesible para todas las familias.

Proyecto de territorio

«Hemos trabajado con mucha discreción, pero ahora es el momento de crear debate y de que la gente entienda que se trata de una necesidad para el territorio», apunta Veciana, quien quiere dejar claro que se trata «de un proyecto de territorio en todo su conjunto, y en el cual estamos todos alineados».

Según ha podido saber el Diari, cuando los representantes de la URVy del COFTentregaron la documentación a la consellera, ésta les hizo saber que Girona también estaba interesada en poner en marcha una facultad de Farmàcia. Desde el territorio aseguran que no quieren que esto se convierta en una competición para saber a quién le faltan más profesionales. «Todos necesitamos más farmacéuticos», acaba Veciana.