Crean un método científico para determinar el origen de cada planta de cannabis

Una empresa ha patentado en 154 países un sistema que abre un abanico de posibilidades a gobiernos, farmacéuticas e industria

28 noviembre 2020 19:40 | Actualizado a 29 noviembre 2020 10:24
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Una empresa de Tarragona ha patentado un método científico que es capaz de determinar el origen de cada ejemplar de planta de cannabis, determinando su variedad. Además, con el futuro software se podrá ofrecer dicha información a los gobiernos, a las farmacéuticas –para elaborar medicamentos– y también a la industria en general. «Hay ya tres agencias policiales internacionales que se han interesado por nuestro estudio porque sus respectivos países quieren regular el consumo de cannabis dentro de sus fronteras», comenta al Diari el criminólogo Marco Antonio Jiménez que, junto con Glòria Sedó, licenciada en Administració i Direcció d’Empreses y analista estratégica, han formado la sociedad Krei («crear» en esperanto).

El trabajo que ha hecho la empresa, recalca Jiménez, va mucho más allá de buscar el ADN de la planta, porque éste solo tiene una certeza del 60 por ciento a la hora de saber el origen de una planta en cuestión. «Nuestro metodo Krei, que es una combinación de técnicas, llega al 90 por ciento de fiabilidad».

Aunque siempre se habla de cannabis sin más, realmente existen decenas de variedades: Skunk #1, Northern Lights, Master Kush, Kali Mist, Black Domina, Amnesia Original, Orange Bud, Jack Herer y un largo etcétera de nombres. Cada variedad tiene sus características determinadas, bien sea a la hora de su cultivo o de sus propiedades psicoactivas (el THC)

La empresa Krei comenzó a trabajar en el estudio a finales de 2019 –aunque la idea nació en octubre del año anterior– y lo concluyó en febrero de este año. La parte de laboratorio la han realizado bioquímicos de la Universidad de Málaga. La firma ha patentado su proyecto en 154 países, «y estamos apretando más en Europa, Canadá y Estados Unidos, porque son los mercados más desarrollados». Actualmente se está fabricando el software, una etapa para la que necesitan financiación exterior. Este programa servirá, por ejemplo, para dar protección a las marcas a la hora de luchar contra las falsificaciones o la propiedad industrial. Por ejemplo, con el móvil uno podrá hacer una foto a la planta y recibir un informe sobre si esta está introducida en la base de dados y si es legal o no. Uruguay, por ejemplo, tiene seis variedades legales, que fueron creadas en España, comenta Jiménez.

«Vemos que el cannabis a nivel mundial está sufriendo una transformación», señala el criminólogo. En este sentido, recuerda que en 2014 Uruguay reguló el consumo de esta sustancia. Lo mismo hizo Canadá en 2018. «Hay un movimiento internacional que arrastra a diferentes estados de EEUU y también a Alemania, en este caso para uso medicinal». Con este trabajo «vemos una oportunidad de apuesta por una herramienta que sea útil para establecer la trazabilidad del cannabis».

La legalización

Si un país legaliza y regula una determinada marca, podrá controlar que no le venga droga ilegal más allá de su frontera, podrá «blindar el circuito», en palabras del criminólogo. En Canadá, por ejemplo, el 51 por ciento del cannabis se compra en el mercado ilegal, porque el legal tiene poca concentración de THC y, además, lleva impuestos. En cambio, en Uruguay el 51 por ciento de dicha droga se adquiere por los circuitos legales, la ilegal es de variedades más potentes.

Para las empresas farmacéuticas, el método también sirve para controlar qué variedades son mejores para fabricar los medicamentos y para detectar que el producto que les llega es el que han elegido por ser el más adecuado. Y policialmente, podría ser utilizado para perseguir y controlar a los grupos organizados que se dedican al tráfico internacional de estupefacientes. España es el principal productor y exportador de marihuana de la Unión Europea. Pero si se habla a nivel de continente, el traficante número uno es Albania.

Para completar el trabajo están buscando financiación de empresas o particulares que estén interesados en este estudio. Esta financiación también servirá para la expansión de la empresa e ir al mercado americano. Y es que con el cambio de gobierno en los Estados Unidos también habrá reformas legislativas a nivel federal para regular dicha droga. En estados como Oregón y California ya está legalizada. Krei precisamente fue invitada a una exposición que se tenía que celebrar este mes de noviembre en California. Por culpa de la Covid-19 se ha pospuesto al 2021. «Allí estaremos, porque el gobierno de los Estados Unidos está muy interesado en el proyecto. Nosotros podríamos hacer una Denominación de Origen (DO) o una Indicación Geográfica Protegida (IGP)».

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