‘Mi hermano no me convencerá. Cada uno piensa distinto y ya está’

La carta se viralizó por las redes sociales en los últimos días. La misiva iba dirigida a Jordi Llopart, alcalde de Creixell, y venía firmada por su hermano Juan Antonio Llopart, vinculado en el pasado a corrientes de ultraderecha como Movimiento Social Republicano. Uno, militante del PDeCAT, partidario del referéndum y de la independencia; otro, contrario a la consulta soberanista y a favor del unionismo. 

En la misiva, Juan Antonio le reprochaba a Jordi que se hubiera convertido en independentista, contradiciendo así los valores que se les había inculcado en casa desde pequeños. Para ello pone de muestra algunos ejemplos, como la pegatina que su padre llevaba en su Ford Fiesta (‘Ser español es un honor, ser catalán es un orgullo’) o el recuerdo de la «bandera nacional» cubriendo el féretro del progenitor en su entierro. 

La carta, publicada el 18 de septiembre, se ha compartido más de 11.000 veces y cuenta con más de 2.200 comentarios. Jordi Llopart, alcalde y destinatario, resta trascendencia al documento y emplaza a tener en cuenta la diversidad de opiniones y pareceres, incluso dentro de una misma familia. «No le he dado más importancia. No se puede vender esta carta como si en Catalunya nos estuviésemos matando unos con otros, porque eso es mentira. No se puede manipular así. No hemos tenido ningún tipo de discusión, nadie fuerza a nadie a pensar de una forma», explica Jordi.

‘No vamos a discutir’
Juan Antonio defiende la fortaleza de la familia en su texto: «El separatismo ha dividido Catalunya… y ha dividido familias, nada ni nadie romperá la nuestra, porque nuestros padres nos enseñaron a amarla». Para Jordi, lo esencial es respetar las opiniones: «Si mi hermano no quiere ir a votar, no iremos a discutir. Cada uno sabe cómo piensa el otro, y cuando nos reunimos en familia la política no es el tema primordial. No somos tan garrulos como para pelearnos por eso».

Jordi recalca que la relación es correcta y ataca a aquellos que quieren utilizar el mensaje de su hermano para hacer daño: «Cada uno puede pensar como quiera, pero lo que no se puede es usar esto como un ejemplo de que aquí nos matamos. Tengo 60 años y durante toda mi vida cada uno ha pensado como ha querido». 

‘Que él pueda votar también’
Jordi, que habilitará locales en Creixell para que se pueda ejercer el voto este próximo domingo, apela al sentido democrático de la consulta: «Mi hermano no me convencerá. Cada uno piensa distinto y ya está. De hecho, luchamos para que mi hermano también tenga el mismo derecho a votar que yo». Y eso a pesar de que Juan Antonio, en la epístola viralizada por Facebook, concluye: «El 1 de octubre no me esperes ante ninguna urna». 

Para Jordi Llopart, en esta divergencia ideológica no hay que encontrar polémica sino fuente de riqueza de pensamiento y diversidad, a pesar de que, en este caso, ambos compartieran infancia y referentes. «En casa puedo haber leído las obras completas de José Antonio, a Buenaventura Durruti o 'El capital' de Marx. Pero me han enseñado a pensar por mí mismo, nadie me ha influenciado. Llegados a este punto, me he acabado posicionando en un lado», explica el máximo representante de Creixell sobre su adhesión al independentismo. Esa misma libertad menciona Juan Antonio en la carta: «En casa se vivía la política, pero nunca nos inculcaron nada. Fuimos nosotros quienes libremente optamos por unas ideas u otras».  

A continuación, se puede leer la carta íntegra escrita por Juan Antonio Llopart a su hermano difundida en su perfil de Facebook: