El Tiempo
Estado Carreteras
Whatsapp
Encuesta
Directorio Empresas
Juegos
La propagación del virus sigue creciendo en Catalunya, pero el Govern no prevé endurecer las restricciones en Semana Santa, ni tampoco suavizarlas, por lo que se mantendrá la movilidad libre dentro de la comunidad con la burbuja de convivencia y seguirá cerrada la restauración por la noche.
En una entrevista a RAC1, el secretario general del Departament de Salut, Marc Ramentol, ha incidido en que «lo más prudente es mantener la situación actual» de las restricciones para la próxima semana, descartando así no sólo pasos adelante sino también atrás. No podemos dar pasos atrás en la primera oportunidad que los indicadores empeoran mínimamente».
En este sentido, Salut mantiene su voluntad de que durante la Semana Santa sigan estando permitidos los desplazamientos dentro de Catalunya si es con la burbuja de convivencia.
Cuando solo un 13,1% de la población catalana tiene una o dos dosis de las vacunas aprobadas contra la Covid-19, Salut confía en incrementar el ritmo con la reincorporación mañana de la vacuna de AstraZeneca y la entrada en juego, durante el mes de abril, del suero de Janssen, que es monodosis.
Según los datos epidemiológicos actualizados ayer por el Departamento de Salut, hay 1.431 pacientes de Covid-19 hospitalizados, 25 más que el domingo, de los cuales 411 están graves en la UCI, uno más que el día anterior, mientras que se notificaron 20 nuevas muertes en las últimas 24 horas, que elevan el total de víctimas de la epidemia en Catalunya a 21.148.
La velocidad de propagación de la enfermedad (Rt) también aumenta y es de 1,06, es decir, que cada 100 infectados contagian de media 106 personas, lo que indica una expansión del virus que hace temer a las autoridades sanitarias una cuarta ola de la pandemia.
El riesgo de rebrote (EPG), el índice de crecimiento potencial de la epidemia, ha aumentado hasta los 201 puntos, tres más que la víspera, aunque la incidencia acumulada de casos por cada 100.000 habitantes a 14 días (IA14) se mantiene estable en 190 casos.
En este contexto, la consellerade Presidencia en funciones y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha enfriado la posibilidad de que bares y restaurantes abran por la noche a partir del 28 de marzo, posponiendo así una relajación que ella misma había apuntado hace una semana. «Todo hace pensar que esta medida tendrá que esperar unos días más», apuntó durante una entrevista en Catalunya Ràdio, en la que se mostró partidaria de «dar aire» a los ciudadanos pero solamente cuando los datos epidemiológicos lo avalen. La patronal del ocio nocturno Fecasarm, que representa también restauradores, reprochó al Govern en funciones su cambio de criterio y exige un «calendario claro de desescalada».
