Motivar y vincular al alumnado, clave en la lucha contra el absentismo escolar

En épocas de crisis económicas importantes, este abandono escolar suele reducirse por la falta de ofertas laborales

26 febrero 2021 08:23 | Actualizado a 31 marzo 2021 15:55
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El absentismo escolar está considerado uno de los problemas más importantes de los centros escolares. Pese a que existen numerosas definiciones y posibles causas, la mayoría de los estudios acerca del absentismo escolar ponen la mirada en la conducta de rechazo al colegio. Cabe destacar que se trata de un fenómeno que se registra más en la educación Secundaria que en la Primaria. El ausentismo suele definirse como la ausencia injustificada, sistemática y reiterada del alumnado en edad de escolarización obligatoria. Generalmente, las causas son impulsadas por el contexto familiar, socioeconómico y cultural. Describir así este fenómeno supone referirse solamente a la última etapa de este problema, cuando ha alcanzado su máximo exponente. Es importante analizar cómo el alumno ha llegado hasta ahí. 

Miquel Àngel Alegret, responsable de proyectos de la Fundació Jaume Bofill, nos arroja luz a este asunto y aporta conceptos nuevos que pueden ayudarnos a entender el absentismo escolar y el consiguiente abandono. «Las causas de este comportamiento pueden ser muy diversas. Una de las primeras, es la necesidad que algunos jóvenes tienen de contribuir económica en su casa», explica Alegret, quien apunta como otra causa la falta de vinculación con el centro escolar. «Por norma general, en el colegio o instituto, tenemos nuestra red de amigos, donde nos sociabilizamos. Si el chico o chica no se siente parte de este círculo, pierde motivación y, por lo tanto, se ausenta», explica Alegret, quien añade que «normalmente, esto es fruto de un poyo insuficiente por parte de los docentes y de la poca diversificación que hay en algunos centros. Todo eso hace que el alumnos se sienta desvinculado, con poca predisposición académica». 
La principal y más grave consecuencia, según este experto en educación, es el abandono escolar. Y es que una de las primera causas del abandono es el absentismo. «Por lo tanto, está claro que trabajar en todo aquello que tenga relación con el vínculo y la motivación del alumno con el centro, puede prevenir el abandono escolar prematuro», asegura Alegret. Se refiere a dotar de más recursos, por ejemplo, las tutorías individuales. 

La asociación entre un concepto y otro es más que evidente. Según datos del Ministerio de Educación de hace aproximadamente un año, la tasa de abandono escolar prematura en España se sitúa en el 17,3%. Una dato que preocupa, teniendo en cuenta que está muy por encima de la media europea. El porcentaje se dispara en aquellas familias vulnerables. «El abandono afecta a aquellos sectores más desfavoridos. Una problemática que sigue mermando las oportunidades educativas y laborales de nuestros jóvenes», apunta Alegret. 

A más crisis, menos abandono

El fenómeno del abandono educativo tiene una estrecha relación con la situación económica del país. «En época de crisis, como la que sufrimos hace diez años, el abandono se redujo bastante, teniendo en cuenta las pocas opciones y ofertas laborales que se presentaban a los jóvenes. En cambio, cuando no hay crisis, hay trabajo, aunque sea en condiciones precarias. Es una especie de incentivo para estos chicos, que apuestan por dejar los estudios e ir a trabajar», explica este experto de la Fundació Bofill. 

En los últimos años, el abandono escolar no ha dejado de crecer. La llegada de la pandemia y con ella una crisis económica importante, la tendencia, según los expertos, es que este fenómeno quede reducido. Las políticas educativas tienen un papel destacado en este asunto. «Atender a la diversidad social y aumentar los niveles de motivación de manera personalizada, retos claves en esta lucha», acaba Alegret.

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