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La Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme de la provincia de Tarragona (FEHT) critica el poco cuidado del primer ministro francés a la hora de aconsejar a los franceses que eviten viajar a Catalunya. El sector turístico no ve «normal» que se lance este mensaje con tanta «tranquilidad», dada la poca incidencia que ha tenido hasta ahora la pandemia en la demarcación.
Las decisiones que van tomando diferentes países, como Francia e Inglaterra, son un nuevo golpe económico para el sector turístico del Camp y del Ebre, que ve desplomarse todos los mercados: el ruso, el francés y el británico, que representan cerca de un 40% de su turismo.
«Está todo muy complicado, todo el mundo está perdiendo dinero», apunta Xavier Guardià, de la FEHT.
El portavoz de la FEHT y responsable de relaciones institucionales dice que estos criterios cambiantes acaban desconcertando al turista que, ante la incertidumbre, opta finalmente por no moverse. El mercado británico y el francés son un perfil de turista muy fiel que representa casi el 40% de los visitantes. «El turista inglés, si viene aquí entre siete y diez días pero ha de estar quince más confinado en casa, no vendrá», afirma.
Salou pide un corredor seguro entre el Reino Unido y al aeropuerto de ReusLa ocupación en los hoteles de la demarcación se ha desplomado hasta un 90% en un territorio que, en un año normal, se encontraría en plena temporada alta. Guardià avisa de que el 40% de hoteles que se ha animado a abrir puede ir descendiendo.
«Cerrarán aquellos que están enfocados exclusivamente al turismo internacional, como el inglés.Los establecimientos que tienen una clientela más diversificada van manteniendo la bandera levantada, pero todo el mundo pierde dinero, el empresariado hace un esfuerzo brutal», remarca. «Parecía que se arreglaría la situación y cada vez vamos a peor», lamenta. El sector insiste en que, sin un plan de ayudas de las administraciones y la ampliación de los ERTE hasta finales de año o incluso en 2021, los negocios sufrirán hasta el extremo de plantearse cerrar definitivamente.
«Es injusto»
Por otra parte, el alcalde de Salou, Pere Granados, pidió ayer a la Generalitat y al Gobierno que trabajen para establecer un corredor seguro entre el Reino Unido y el aeropuerto de Reus que garantice la llegada de turistas británicos a la zona. Granados lo justifica por el hecho de que la Costa Daurada y las Terres de l’Ebre se están viendo «muy poco afectados» por la Covid-19.
Según el alcalde, es «injusto» que se ponga a todo el mundo «en el mismo saco» de la cuarentena de 14 días impuesta por el Reino Unido a las personas que provienen de España. Por este motivo, exige que se considere a Salou como un destino seguro, en la línea de lo que se plantea para Baleares y Canarias. Granados advirtió de que solo con el turismo de proximidad «no es suficiente» para mantener la actividad turística en todo el litoral español.
