La compra de CatalunyaCaixa por parte delGrupo BBVA supondrá la pérdida de 182 puestos de trabajo en la demarcación de Tarragona. Así lo han confirmado fuentes sindicales a este rotativo después de que el pasado 20 de octubre la entidad que preside Francisco González y los sindicatos firmaran el Expediente de Regulación de Empleo (ERE). En total, la cifra de empleados afectados asciende a 1.557.
De momento se está estudiando el sistema de salidas, una operación que está sujeta al cierre de oficinas, y que irá desarrollándose de forma progresiva hasta el 31 de diciembre de 2017. No obstante, a partir del 1 de enero, algunos de los empleados ya dejarán su puesto de trabajo, y las nuevas extinciones se irán produciendo de forma trimestral. De esta forma, cuando se acabe el ERE, esta entidad habrá perdido un tercio de su plantilla en la demarcación de Tarragona, que ahora mismo es de 528 trabajadores.
Del total de personas afectadas, 155 se acogieron a una de las medidas de extinción voluntarias propuestas por la entidad en la primera fase de negociación del ERE. 98 serán prejubilaciones, 6 dimisiones voluntarias incentivadas, 23 excedencias y 28 extinciones voluntarias.
Ya en la segunda ronda, se fijaron 27 extinciones forzosas, además de 43 personas que deberán cambiar de oficina en los próximos meses. Los traslados son una de las fórmulas que finalmente accedió a recoger la entidad en la negociación, para mitigar los efectos de una integración bancaria que ha sido especialmente dura en la demarcación de Barcelona.
El banco abrió 400 plazas a concurso para que trabajadores de CX pasen a una oficina de BBVA, de las cuales 150 eran en Catalunya y las otras 250 en el resto del Estado.
De los más de cuarenta empleados de la demarcación que han ganado una de estas vacantes, dieciséis irán a una oficina de la misma demarcación, seis a las comarcas de Lleida y 21 al resto de España.
A partir del ERE, las oficinas tendrán menos personal, pero la extinción de contratos también obligará al cierre de sucursales. Serán alrededor de 150 en Catalunya, aunque en este caso los detalles aún se desconocen.
Los sindicatos han informado que en la primera fase, prevista para antes del 20 de enero de 2016, bajarán la persiana un total de cinco oficinas en la demarcación de Tarragona. Estos esperan a que la entidad lo comunique previamente a los clientes, antes de dar a conocer la relación de afectadas. Pese a ello, concretan que Tarragona ciudad mantendrá el número actual y que en Reus desaparecerá una de éstas.
Las comarcas del sur de Catalunya suman un total de 157 oficinas de esta entidad, que hace tan solo dos años ya sufrió otro Expediente de Regulación de Empleo (ERE). En 2013 fueron 2.395 los trabajadores de CatalunyaCaixa en Catalunya que perdieron su empleo, ya que en aquellos momentos la entidad estaba nacionalizada y debía adelgazar su estructura para ser vendida.
A este punto se había llegado después de la integración de las antiguas Caixa Tarragona, Caixa Catalunya y Caixa Manresa, en un proceso que ya supuso una primera reestructuración.
