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La Audiencia de Tarragona juzga hoy jueves un hombre que afronta 22 años de prisión por presuntos abusos sexuales a menores y exhibición de pornografía.
Los hechos pasaron en El Vendrell y, según la fiscalía, el hombre se tocaba ante los menores o hacía que estos lo masturbaran. Dos de las víctimas son un niño de seis años y una niña de tres a los cuales hizo de canguro en una quincena de ocasiones durante los meses de agosto, septiembre y octubre del 2017.
Las otras víctimas tenían cuatro y ocho años, y eran hijas de una mujer a quién conoció mientras hacía de voluntario en la reforma de una masía. El procesado también mostró videos de contenido pornográfico al niño de seis años, según el fiscal, que pide 2.000 euros de indemnización para cada víctima.
El procesado, sin antecedentes penales, hizo de canguro a dos hermanos -un niño de seis años y una niña de tres años- en 2017. Según el fiscal, en varias ocasiones que no se han podido concretar "con el ánimo de satisfacer sus deseos sexuales, al tiempo que se masturbaba, hacía que el menor lo mirara o hacía que el menor lo masturbara, en presencia de la menor". Igualmente, el acusado mostró vídeos de contenido pornográfico al niño a través del teléfono móvil.
El acusado, además de hacer estas tareas de canguro vivía y colaboraba en una comunidad de rehabilitación de una masía. Entre enero y junio de 2018 el hombre también cometió abusos a las hijas de una mujer que también iba, y que entonces tenían cuatro y ocho años. Según la fiscalía, "con el mismo ánimo de satisfacción sexual hizo que el masturbara a la menor de cuatro años y se va masturbó ante ella, estando presente la hermana".
Igualmente, cuando los dos menores a quienes hacía de canguro también acudían en la masía, durante los fines de semana entre enero y junio de 2018, "se quedaron a solas con el acusado y este se masturbaba delante suyo o hacía que masturbaran". Cuando se descubrieron los hechos los familiares lo denunciaron y el hombre ingresó en prisión provisional el 15 de junio de 2018.
La fiscalía pide 22 años de prisión. En concreto, seis para cada uno de los tres delitos continuados de abuso sexual a menores; tres años más por un delito continuado de abuso a menor -en este caso para presenciar los abusos; y, finalmente, un año de prisión por un delito de exhibición de material pornográfico a menor.
El ministerio público solicita que el hombre no pueda acercarse ni comunicarse con tres de las víctimas durante siete años, y con la cuarta durante tres años. Además, la fiscalía pide que el procesado indemnice los representantes legales de los menores con 2.000 euros para cada uno en concepto de daños morales.
