Calafell agilizará las cámaras en las urbanizaciones por la oleada de robos

Los dispositivos de vigilancia leerán matrículas para investigar tras la comisión de un delito

07 enero 2019 19:48 | Actualizado a 07 enero 2019 19:58
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Vecinos de la urbanización Bellamar de Calafell denuncian los reiterados robos que están sufriendo en sus viviendas desde hace días. La situación no es única en esa zona.

Durante el mes de noviembre los ladrones se cebaron con Calafell Parc y hace unos días hasta tres casas de la calle Costes del Garraf fueron robadas con pocas horas de diferencia mientras sus propietarios estaban fuera.

Profesionales
El concejal de Seguridad Ciudadana, Joan Maria Triadó, reconoció la situación y la dificultad de intervenir. Considera que los asaltantes son «profesionales» que proceden del área metropolitana de Barcelona y que se expanden cuando hay redadas en la capital.

En este sentido apunta que puede acelerarse el despliegue para instalar cámaras de vigilancia a las entradas de los diferentes núcleos de población. Ese proyecto se ha retardado por los problemas de cobertura que permite llevar las imágenes a un control central.

Solucionado
Ahora esos problemas estarían solucionados, por lo que los técnicos ya han visitado diferentes núcleos para estudiar cómo desplegar esas cámaras. El objetivo es poder identificar a todos los vehículos que acceden y salen de las urbanizaciones para poder tener líneas de investigación tras la comisión de algún delito.

La dispersión de delincuencia del área metropolitana tuvo una muestra hace unas semanas en Sant Jaume dels Domenys. Una abuela sufrió un robo por el método del abrazo. Días antes los mossos habían desplegado un operativo contra una banda especializada en estos asaltos que acabó con quince detenidos.

Más patrullas
No obstante los vecinos de Calafell piden más patrullas. Pero el concejal reconoce que hacen falta más policías. Señala que se ampliará la plantilla con cinco agentes de manera rápida y posteriormente serán otros ocho.

Triadó dice que esas bandas de ladrones estudian los movimientos de la policía y también las dinámicas de los vecinos. En este sentido pide colaboración ciudadana para dar aviso a los cuerpos de seguridad en el caso de detectar movimientos extraños de personas o coches por los núcleos.

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