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El Ayuntamiento de Calafell ha aprobado una modificación del convenio que tiene con el departamento de Interior de la Generalitat para imponer medidas alternativas a las multas económicas a los menores de edad denunciados por tenencia o consumo de drogas.
El objetivo es imponer medidas alternativas a las sanciones penales y económicas ya que desde el Ayuntamiento se considera que acaban pagando los padres y por tanto no tienen el efecto pretendido con los menores.
Más agilidad
El sistema también permite una mayor agilidad a la hora de imponer una sanción ya que en el caso de la vía penal las actuaciones judiciales suelen ser más lentas.
Los menores que sean identificados con drogas o consumiendo podrán ser denunciados y la concejalía de Juventud del Ayuntamiento podrá imponer medidas para que los jóvenes realicen actividades educativas y en favor de la comunidad.
Cuatro años
La modificación del convenio se acoge a la nueva normativa que no permite que sean indefinidos, sino que deben estar limitados a una duración máxima de cuatro años.
La Policía Local ya activó unas patrullas especializadas en el control en los entornos de los centros escolares específicamente para evitar el consumo de marihuana entre los jóvenes.
Los menores denunciados podrán ser rápidamente castigados con el nuevo convenio con el departamento de Interior.
