Denuncian el peligro de la carretera de Les Madrigueres por el mal asfalto y señalización

La carretera que atraviesa la zona de Les Madrigueres, que une el barrio de Sant Salvador de El Vendrell con Calafell, incrementa el tránsito cuando comienzan los periodos vacaciones, como el de esta Semana Santa, o los meses de verano.

Esa vía, paralela a la playa, enlaza las zonas costeras y es uno de los principales accesos a Calafell. Los vecinos de la zona y propietarios de locales y restaurantes que hay junto a la carretera denuncian el mal estado del pavimento y que la pintura señalizadora sobre el asfalto son nada visibles al estar muy desgastadas. Una situación que se agrava por la falta de iluminación.

Camping
Los vecinos señalan especialmente peligroso un paso de cebra que hay a la salida del Camino del Romaní, que sobre todo utilizan los clientes de un camping para cruzar la carretera al ir a la playa. «No se ve. Los frenazos son habituales. De noche es un peligro. Han habido varios sustos», advierte Rafa Serrano, de uno de los restaurantes.

Hace unos meses un coche se empotró de forma violenta contra el pilar de un edificio en un vial paralelo a la carretera. Todo apuntó a que el origen del accidente estuvo en el exceso de velocidad.

Sin efecto túnel
La carretera pasa entre la playa y una zona de campos por lo que al no haber edificaciones carece del efecto túnel, lo que favorece a que los conductores aprieten el acelerador. En este sentido los vecinos de la zona piden instalar elementos que obliguen a reducir la velocidad a los conductores.

La Policía Local realiza durante el año controles de velocidad en la zona. De hecho ha anunciado que en los próximos días impulsará una campaña de vigilancia, precisamente por el incremento de desplazamientos que habrá en el municipio con la llegada de muchos propietarios de segundas residencias y visitantes.

No sólo controles
Pero los vecinos señalan que el problema no se soluciona con controles esporádicos en  algunos días y que lo necesario es instalar medidas permanentes. 

También denuncian el mal estado del pavimento. Los vecinos y propietarios señalan desde hace años que en días de lluvia intensa la carretera queda inundada y en ocasiones hasta durante varios días permanece cerrada ya que la Policía Local la corta por seguridad.