La Plaça Vella de El Vendrell se llenó de vecinos de todo el Baix Penedès en una concentración para condenar las cargas de los cuerpos de seguridad del Estado durante el pasado domingo.
«La magnitud de lo vivido el pasado domingo no lo olvidaremos nunca», advirtió en nombre de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Josep Maria Llasat, que definió a las cargas policiales como «una violación de los derechos civiles y políticos».
Si durante la mañana algunos establecimientos habían abierto las puertas, por la tarde la práctica totalidad cerraron en la capital del Baix Penedès.
En una Plaça Vella llena con la participación de vecinos llegados de toda la comarca, se reclamó la intervención de las instituciones europeas «y la inmediata retirada de los cuerpos de policía del Estado».
No caer en provocaciones
Llasat señaló la importancia de que en las próximas horas «no debe caerse en provocaciones». Señaló como mientras se producía la concentración para condenar los hechos del 1-O, en la Rambla había un grupo de personas con banderas españolas.
Uno de los momentos de la concentración fue la llegada de bomberos del parque de El Vendrell y que fueron aplaudidos por los vecinos y con gritos de «más bomberos y menos policías».
Al acabar el acto el propio Llasat pidió a los concentrados no acudir a la Rambla por la presencia del grupo que lucía banderas españolas.