Un poro en la válvula de venteo del sistema de refrigeración del reactor nuclear de Vandellòs II es el motivo por el cual la central del Baix Camp está parada desde el pasado 2 de marzo.
Durante los próximos días se realizará la intervención para reparar la soldadura, situada en un sitio de difícil acceso y verificar si el resto de válvulas del sistema están en condiciones de operatividad.
El equipo técnico de la Associació Nuclear Ascó-Vandellòs (ANAV) ha trabajado en la planificación de las tareas que debe ejecutar para volver a la productividad y ha decidido ampliar el programa de trabajo a una intervención en la línea de drenaje de los generadores de vapor, y una extensión de la inspección a soldaduras similares.
La central registraba durante las últimas semanas y, de acuerdo a los procedimientos establecidos, un pequeño aumento del volumen de agua recogido en los sumideros del interior del edificio de contención, señal de que había una pérdida de líquido por algún poro.
En todo momento, este volumen de agua de más se ha mantenido en valores residualles, de unas treinta veces inferiores a lo establecido en las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento (ETF) de la central. Por tanto, la seguridad en el proceso de producción eléctrica no estaría afectado.
Durante la mañana del pasado viernes día 2 de marzo, el equipo que seguía la incidencia identificó, mediante una inspección robotizada, la zona de origen del goteo.
Ante la imposibilidad de determinar si la procedencia era o no un componente de la barrera de presión, se decidió iniciar la parada de la planta para acceder y establecer las actuaciones correspondientes.
En esta segunda inspección se confirmó la existencia de un goteo de agua en la soldadura de una válvula de venteo, por lo cual y, de acuerdo a lo establecido en las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento, se determinó llevar a la planta a parada fría y preparar el programa de intervención.
La central se encuentra parada y en condición segura, según garantiza ANAV, organismo que también sostiene que el suceso no ha tenido repercusión para las personas o el medio ambiente. De hecho, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ya calificaron el incidente de inocuo (0) en una escala del 0 al 7.
Sin embargo, el lunes, Ecologistas en Acció denunció que la central había operado al menos durante dos semanas "de forma peligrosa" y no paró inmediatamente, tal como marcan las ETF, al detectar una fuga de agua "contaminada".