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El faro es uno de los principales atractivos de Torredembarra. Numerosas personas han mostrado en los últimos años su interés en poder visitar estas instalaciones. Hasta ahora no han podido. Pero la situación cambiará en los próximos meses, ya que el Ayuntamiento y la Autoritat Portuària están ultimando los trámites necesarios para iniciar las visitas guiadas, si no surgen contratiempos, a partir de la próxima Semana Santa.
La concejal y presidenta del Patronat Municipal de Turisme, Núria Gómez, se muestra entusiasmada. Asegura que tienen «muchísimas peticiones». Las visitas se realizarán en grupos reducidos, de un máximo de diez personas, que podrán conocer detalles como quién fue el arquitecto que lo proyectó o cómo se realizó la construcción. De hecho, es el último faro construido en el segundo milenio. La voluntad de Gómez es ser la guía de la primera visita.
El Patronat, sin embargo, busca ir más allá y programar una ruta. «Las maridaremos con la gastronomía del Baix Gaià. Prepararemos paquetes turísticos que combinen ambas opciones y ayuden a promocionar nuestro territorio», explica la edil. Su intención es terminar la visita con un una comida en un restaurante de la zona. «Y si se realiza en una hora intermedia, como a media mañana, prepararíamos un piscolabis en las mismas dependencias, siempre promocionando los productos típicos», señala Gómez, convencida de que se convertirá un nuevo punto de referencia turístico para Torredembarra porque, «además, tiene unas vistas magníficas».
El precio de la entrada todavía no está definido, pero la previsión del Patronat es que sea una cantidad «simbólica».
Locales y franceses
Vecinos de Torredembarra y también turistas han mostrado su interés en los últimos años en poder ver desde dentro las dependencias. El Patronat de Turisme reconoce que la mayoría han sido torrenses, pero también visitantesprocedentes de otros países europeos, principalmente de Francia.
La Autoritat Portuària se ha encargado de los trabajos de mejora del faro para garantizar las condiciones de seguridad necesarias para poder abrir al público. Ahora sólo falta formalizar la firma del convenio, prevista para después de fiestas.
