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Los golpes en la puerta del número 18 en la calle Castillejos no eran normales poco después de las 11 horas de esta mañana de lunes. El ruido ha despertado la curiosidad de un vecino, que se ha percatado como dos hombres forzaban la cerradura de la vieja puerta para acceder a una vivienda vacía, propiedad de algún banco que le costará litigar en caso de que entren a vivir okupas.
El vecino ha llamado a la Policía Local, que ha enviado patrullas para ver quér ocurría en esta casa del centro histórico situada a pocos metros del Celler Cooperativa de la ciudad.
Los agentes han visto que la puerta había sido forzada y la cerradura reventada. Dentro todavía estaban los posibles autores, tío y sobrino, que han sido arrestados por un robo con fuerza en grado de tentativa.
Los dos detenidos, de 39 y 20 años, son viejos conocidos de la Policía Local y Mossos d'Esquadra. Ambos son okupas en otra calle de la ciudad y según fuentes de la investigación se dedican a localizar viviendas de bancos vacías, cambiar las cerraduras, conectar red de agua y luz de forma fraudulenta y 'alquilar' o vender las llaves al mejor postor.
En esta tesitura estaban tío y sobrino cuando la Policía Los ha interrumpido y detenido este mediodía de lunes. Mossos ha asumido a los arrestados esta tarde y posiblemente pasarán a disposición judicial mañana martes.
Aunque faltará por ver qué decide el Juzgado de Guardia de Tarragona, uno de los dos presuntos ladrones, el tío, tiene una orden de ingreso a prisión, además de una hoja de antecedentes interesante. Posiblemente, éste ingrese a prisión cumpliendo el auto judicial pendiente.
'Trabajando' con su hijo de cuatro años
La localización de tío y sobrino cometiendo un presunto delito no es un hecho aislado en este vecino de Vila-seca de 39 años. No hace muchos meses, en la calle de L'Hospital se repitió el episodio. Un ruido despertó la curiosidad del vecindario, que llamaron a la Policía Local.
En aquella ocasión, el ladrón intentó entrar en el número 15 de esta calle del centro histórico, cortándose en una pierna al romper el cristal de la puerta del balcón de la primera planta.
La descripción del presunto ladrón iba acompañada de un detalle que no pasaba desapercibido. Junto a él un chaval de 4 años iba en bicicleta. Es su hijo.
Los agentes de la Policía Local localizaron poco después de hablar con el vecino y testigo de los hechos, al padre y al hijo. La ropa, las manchas de sangre y el pequeño con la bicicleta fueron indicios suficientes para detener al padre y dejar al menor con su tutora legal en el bloque de pisos donde viven de forma ilegal, según fuentes conocedoras del caso.
El invernadero desmantelado por los Mossos en el piso que hoy han intentado okupar
El número 18 de la calle Castillejos es una casa antigua muy apetecible para okupas desde que nadie reside en ella, hace ya bastante tiempo. En 2014, la casa fue registrada de arriba abajo cuando Mossos irrumpió en enero para desmantelar una plantación indoor de marihuana a cargo de dos jóvenes que aprovechaban la discreción de la vieja casa para su negocio ilegal de cannabis.
En aquella ocasión, los Mossos detuvieron a dos jóvenes de 28 y 24 años y desmantelaron aquellas habitaciones que habían convertido en una plantación indoor de marihuana.
