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Un hombre y su hijo se sentarán en el banquillo de acusados de uno de los dos Juzgados de lo Penal de Reus acusados de un delito contra la fauna por haber pescado ilegalmente en Cambrils dátiles de mar, una especie de molusco bivalvo protegido tanto por la normativa española como europea.
El fiscal pide para ambos un año y medio de prisión e inhabilitación para cazar o pescar durante tres años y medio. Asimismo, solicita el pago de una indemnización de 10.000 euros por los daños medioambientales ocasionados, de manera que tal dinero se invierta directamente en la zona afectada y, si ello no es posible, en otro objetivo medioambiental lo más similar posible, debiendo dar cuenta al Juzgado del destino de la indemnización.
Los dos procesados son de nacionalidad española y vecinos de Reus. Sobre las ocho y media de la mañana del 29 de mayo de 2019 se dirigieron a la zona del espigón del puerto de Cambrils para proceder a la pesca de ejemplares de dátiles de mar (Lithophaga litophaga), una especie de la familia Mytilidae, que se caracteriza por habitar en el interior de las rocas calcáreas del litoral mediterráneo, siendo un elemento de gran valor ecológico en el ecosistema rocoso marino. Además, su captura implica la destrucción irreversible de su hábitat.
El padre, valiéndose de un equipo de submarinismo, procedió a la obtención de ejemplares de dátiles de mar. Para ello hizo uso de un martillo –tipo mazo– para romper la roca y capturar los bivalvos. De esta manera provocó la eliminación total de la capa superior del sustrato de los arrecifes rocosos. Mientras tanto, su hijo permanecía en el exterior realizando tareas de vigilancia y esperando a recoger el cubículo donde se hallaban depositados los ejemplares extraídos.
El decomiso
Instantes después acudieron al lugar los agentes de la Unitat Regional de Medi Ambient (URMA) de los Mossos d’Esquadra. Decomisaron 3,8 kilos de dátiles. También intervinieron los objetos que portaban los imputados: una chaqueta de neopreno, un regulador de oxígeno, una chaqueta y una bombona de oxígeno para inmersiones.
Las pérdidas en los servicios ecosistémicos producidos por la pesca ilegal del dátil de mar debido a la degradación del hábitat se cuantifica entre 532 y 6.400 euros al año, estimándose necesarios 30 años para la recuperación del ecosistema.
Tras la inspección subacuática realizada por los agentes de la URMA el 2 de julio del mismo año se comprobó que el número de ejemplares de dátiles de mar reimplantados con éxito no superaba los 20 ejemplares.
