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La temporada turística en la Costa Daurada ha arrancado con fuerza. Desde enero hasta mayo se ha registrado un incremento del 5% en pernoctaciones respecto el año anterior. El sector augura una buena temporada pero pese a este buen inicio, cree que no se superarán las cifras récord del 2017 cuando se alcanzaron los 20 millones de pernoctaciones.
Uno de los principales motivos es la reapertura de otros destinos del Mediterráneo como Turquía, Egipto o Túnez, que habían estado «fuera de juego» durante muchos años por motivos geopolíticos y ahora irrumpen con precios muy competitivos.
«No podemos ni queremos competir en precio, sino que lo haremos con calidad y en atractivos turísticos», explicó el presidente de la Federació Empresarial d’Hostelería i Turisme de la provincia de Tarragona (FEHT), Eduard Farriol. Este fenómeno hará que parte de los mercados centroeuropeos, sobre todo el ruso, vuelva a estos destinos, de modo que todo el sector turístico nacional se resentirá.
Desde la FEHT creen que esta temporada es muy probable que haya un descenso del mercado nacional en la Costa Daurada . Un segmento que el año pasado supuso la mitad de las pernoctaciones. La apertura de otros destinos del Mediterráneo hará que los turistas nacionales vuelvan a tener acceso a las Islas Baleares o a las Islas Canarias. «Hace prácticamente un año era imposible encontrar alojamiento en Mallorca y ahora es posible», afirma Farriol.
Crecimiento del mercado alemán
El sector turístico pronostica un importante crecimiento del mercado alemán, del irlandés y del holandés.
Una tendencia similar a la que se ha producido durante estos primeros meses. Según los datos del Observatori del Parc Científic i Tecnològic de Turisme i Oci de Catalunya, el mercado alemán registró un incremento del 31,3%, el belga un 23,4%, el holandés un 19%, el británico un 14,5%, el ruso un 8,23% y el irlandés un 7,29%. En cuanto al tipo de alojamientos, los hoteles registraron un aumento del 6%, un 2% los campings y un 13% los apartamentos.
La fidelización es otro de los puntos fuertes del sector. El 70% de los turistas, es decir, 7 de cada 10 vuelven a visitar la Costa Daurada.
Para poder competir con estas destinaciones emergentes trabajarán para ofrecer calidad y formar a los profesionales que trabajan en el sector.
En los últimos cuatro años el sector turístico ha invertido más de 200 millones de euros en la mejora de los establecimientos y de los servicios. Asimismo Farriol destacó que las posibilidades del territorio son muy diversas «Somos una destinación única, a muy pocos quilómetros tenemos PortAventura, ocio, cultura, restauración, enoturismo...», apuntó.
Más acciones de promoción
El sector considera que el crecimiento de estos primeros meses se debe al trabajo de promoción conjunta que se lleva a cabo desde el Patronat de Turisme de la Diputació con Cambrils, Salou, Vila-seca y la FEHT, además de la apuesta por el turismo deportivo.
En este sentido, el pasado mes de mayo se organizó el Costa Daurada Life, un inovador famtrip que atrajo más de 100 agentes de viajes de toda España.
Durante un fin de semana tuvieron la oportunidad de conocer la Costa Daurada de primera mano. Una experiencia que probablemente se repetirá el próximo año. También se han realizado distintos actos de promoción en Francia, Bélgica, España, Rúsia o Alemania.
Desestacionalizar la temporada
Por otro lado, Benet Presas, concejal de turismo de Salou, explica que el turismo deportivo «ayuda a alargar la temporada y a conseguir más visitantes durante los meses de menos ocupación».
Durante la Semana Santa la Costa Daurada acogió más de 20.000 deportistas. Además también se han organizado otros grandes campeonatos como el MundiAdvocat con 3.000 participantes, I Iberica Dancesport 2018 de bailes de salón o la Challenge Salou.
La Costa Daurada también está trabajando en la captación de nuevos mercados. Concretamente los de los países del Este de Europa como Polonia, Ucraina o Bielorrusia y en los Estados Bálticos como Estonia, Lituania y Letonia. Además también se está reforzando el mercado alemán.
La situación política
La convulsa situación política que se vivió en Catalunya a principios de octubre con el referéndum, prácticamente no tuvo impacto en el turismo de la Costa Daurada.
La mitad de las pernoctaciones que se registraron el año pasado, más de 10 millones, fueron turistas nacionales. «El turismo necesita paz y tranquilidad», aseguró Farriol. En este sentido, los atentados de Cambrils y Barcelona tampoco repercutieron en el sector. La afectación se produjo el mismo fin de semana pero los alojamientos se llenaron tanto en septiembre como en octubre.
Tampoco preocupa al sector el tema de la turismofobia. Según Marta Farrero, directora técnica del Patronat de Turismo de la Diputació, es «más un efecto espejo de otras situaciones que están pasando en otros lugares que no un problema real». En este sentido, exponen que los municipios de la Costa Daurada han crecido paralelamente a la actividad turística.
«A día de hoy la previsión que tenemos los hoteleros para julio no es demasiado buena. Si podemos llegar a las cifras del 2016 (con más de 16 millones de pernoctaciones) podemos darnos por satisfechos», concluye Farriol.
