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Desde que comenzaron a aplicarse medidas restrictivas por la situación de alarma sanitaria, las entidades, empresas, escuelas y centros de formación no reglada de Catalunya, han tomado todas las medidas para garantizar la seguridad de los alumnos.
Sin embargo se ven otra vez con un cierre impuesto a partir del jueves que amenaza con el cierre a muchas de las empresas de formación privada.
Llevan meses sin actividad. Tres de confinamiento, dos de inactividad en verano y diversos periodos que han impedido la presencialidad de los alumnos.
El problema es que la administración considera a estos centros de formación como actividades extra escolares. Estos centros no dependen del Departament d’Educació, por lo que desde las academias señalan que no tendría competencias para restringir la actividad de formación no obligatoria.
«No son extra escolares. Son empresas de formación privada en las que los alumnos se forman libremente». En este sentido se sienten menospreciadas por parte de la administración.
Agravio
Denuncian lo que consideran un agravio del plan PROCICAT ya que la formación no obligatoria dependiente de Educació, como las escuelas oficiales de idiomas (EOI), no están sujetas a las mismas restricciones que las empresas que ofrecen esa misma formación. Las primeras pueden mantener una presencialidad reducida pese a que la actividad es la misma. En cambio las escuelas privadas deben cerrar.
Desde los centros privados explican que también ellos preparan a los alumnos para exámenes oficiales de idiomas, informática y otras disciplinas. El cierre afecta a los alumnos con dificultades académicas o que quieren reforzar su formación para una oportunidad laboral.
Las empresas señalan la inversión realizada en los centros para garantizar la seguridad de alumnos y profesores. Los formadores además ya han sido objeto de ERTOS y ahora su situación es más vulnerable.
Afecta a los alumos
Señalan que la suspensión de la presencialidad también afecta a los alumnos con dificultades para una formación en línea y fomenta la economía sumergida en lugares no regulados y sin los controles de aforo y seguridad de las academias.
La situación ha motivado un goteo constante de alumnos que amenaza a la continuidad de muchos centros. Por ello reclaman mantener la presencialidad a partir del jueves sin el agravio entre la formación no obligatoria de empresas privadas y la no obligatoria del Departament d’Educació.
