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La Federació d’Empresaris de Cambrils (Fecam) ha mostrado su desacuerdo con la adquisición del edificio de la antigua bodega de la Cooperativa por parte del Ayuntamiento de Cambrils. Días antes del anuncio del preacuerdo entre el consistorio y la entidad para comprar el inmueble, los empresarios enviaron una carta a la alcaldesa, Camí Mendoza, para mostrar su rechazo a esta decisión política.
En el documento al que ha podido tener acceso el Diari, la asociación considera que «no es el momento adecuado para hacer esta inversión por la situación de crisis económica producida por la Covid-19 en la cual nos encontramos inmersos». La Fecam recuerda que en las cumbres económicas celebradas durante el confinamiento para la reactivación de la economía local ya pidieron que no se adquiriera la antigua bodega catalogada en marzo de 2018 como Bé Cultural d’Interès Local (BCIL).
Para los empresarios, ante esta situación excepcional por la crisis sanitaria, el equipo de gobierno debería destinar los 677.658,20 euros del superávit de 2018 que se reservaron para esta operación a otra finalidad. En este punto cabe recordar que desde el gobierno siempre se ha explicado que una vez la partida se asigna a una inversión financiera sostenible se debe cumplir con el objetivo, sino, la dotación económica se destina obligatoriamente a reducir deuda de las arcas municipales. «Somos conocedores de que el dinero no se perdería, tal y como se ha dicho en alguna ocasión. Hay maneras de reconducir esta partida rebajando deuda pública y pidiendo un préstamo para ‘otras necesidades’, todo dentro de la legalidad (…) Por esto solicitamos que este dinero se destine a dar ayudas al tejido empresarial tan castigado por esta pandemia», reclaman en la carta enviada el 24 de septiembre, cuatro días antes de conocerse el anuncio, por parte de la alcaldesa, que se había llegado a un preacuerdo con los responsables de la Cooperativa.
Consulta ciudadana
Otra petición de la Fecam es que el gobierno de Camí Mendoza tenga en cuenta la opinión de los cambrilenses antes de hacer efectiva la adquisición. «Dada esta situación y la cantidad de personas del municipio afectadas creemos que, en todo caso, se debería hacer una consulta popular sobre este tema», afirman. Una propuesta que en el pleno celebrado el pasado lunes ya hizo el grupo municipal de Ciutadans, que presentó una moción con el fin de conocer qué piensa la ciudadanía sobre la compra del edificio histórico.
En la sesión plenaria, la formación naranja sugirió que la consulta tuviera dos opciones: la primera, si el remanente se destinaba a la adquisición del inmueble, y la segunda, si se invertía en acciones destinadas a paliar los efectos económicos de la Covid-19. Para dar más fuerza a la propuesta, la concejala Patricia de Miguel se refirió a una encuesta que se realizó recientemente en la página de Facebook Cambrils En Positiu, con 354 votos en contra de la compra y 24 a favor. «Se tiene que dar voz a los vecinos, si creen conveniente o no esta compra y aceptar con deportividad el resultado», aseguró.
Ante esta sugerencia Camí Mendoza explicó que el Centre d’Estudis Cambrilencs, la Associació Vilacentre, los vecinos del Barri Antic y l’Estació y el Casal Popular habían presentado unas instancias para pedir al gobierno esta adquisición. «Es una oportunidad única para dar valor, conservar, estudiar y divulgar el patrimonio local», afirmó rotunda la alcaldesa para defender la postura de su equipo.
