Polémica por un vídeoclip 'hot' rodado en la playa de Altafulla

El pasado 28 de mayo, en diferentes plataformas digitales salía un vídeoclip de música latina del artista cubano afincado en Barcelona Yan the One.

El clip musical se grabó en gran parte en la playa de Altafulla y algunas de los fragmentos reflejan este idílico tramo del litoral tarraconense. El vídeoclip está editado por Sabotaje Productions.

Azulito no habría trascendido más allá del circuito musical si no hubira habido este viernes, 4 de junio, una queja de uno de los partidos que configuran la oposición en el Ayuntamiento.

Alternativa Altafulla ha querido denunciar públicamente que "el vídeoclip degrada gravemente la imagen de la mujer como una sumisa y objeto sexual usando imágenes de la playa de Altafulla".

Según el comunicado de Alternativa Altafulla pide al gobierno local que "persiga estas imágenes de Altafulla" que pueden hacer daño "a los adolescentes y a la sociedad en general".

El partido político, el máximo representado en la oposición, además remarca que el actual consistorio se considera feminista y contra toda discriminación de la mujer, por lo que no debería aceptar esta imagen de la playa altafullense, uno de los valores del turismo familiar de la localidad.

La coalcaldesa y responsable de Polítiques de Geènre, Alba Muntadas, admite que la primera noticia del vídeoclip la han conocido en las últimas horas y que nadie, ni productora, ni artistas, se habían dirigido al Ayuntamiento para informar de la grabación.

Muntadas remarca que el permiso de este vídeoclip, al ser grabado en la playa, debería concederlo el Departament de Costas del Estado, responsable del frontal marítimo. Aunque tampoco tienen conocimiento de que se haya pedido permiso para grabar.

Más allá de los trámites burocráticos, Muntadas explica que "nos hemos enterado del vídeoclip por las redes sociales y evidentemente tampoco compartimos ni el mensaje de la letra ni las imágenes, donde aparece la mujer en un formato muy sexualizado".

Muntadas, sin embargo, quita hierro en que el escenario de este clip musical esté grabado en Altafulla y considera "anecdótico" este factor.

Insiste en que la tipología de música no se ajusta a los parámetros que se debería inculcar a los jóvenes y que tiene mensajes y formatos que denigran a la mujer.

Más allá de la polémica y del debate de la tipoloía de música, el baile y el lenguaje usado por estos artistas, el clip no muestra las imágenes supuestamente denigrantes en la playa o en un emplazamiento que sea fácilmente identificable.