Salou quintuplica las inversiones tras sanear las arcas municipales

El alcalde Pere Granados y el concejal de Hisenda, Toni Brull, presentaron ayer los presupuestos de 2017, que este mediodía se aprobarán probablemente con el voto contrario de los partidos de la oposición: Ciutadans, PP, ERC y Guanyem.

Las cifras que se someterán a votación tienen una gran novedad respecto a los últimos tres años: una partida de inversiones ambiciosa con 2,7 millones de euros previstos. Hasta la fecha, el Ayuntamiento de Salou estaba sometido a la contención del gasto en inversiones. Lo marcaba el plan económico-financiero de la Generalitat, que establecía un techo de gasto en inversiones de 525.000 euros.

Tras superar este trienio de contención, el Ayuntamiento ha diseñado un presupuesto con una partida en inversiones que quintuplica la de este año. «La salud económica de Salou es muy buena. Tenemos un endeudamiento inferior al 30% cuando el techo está en 110%, además el remanente de 2016 ha sido de 8 millones y con toda seguridad el de 2017 también será positivo. Y todo ello, congelando la presión fiscal a los ciudadanos», explicaban Brull y Granados.


El campo de fútbol
La gran apuesta de 2017 será la construcción de un tercer campo de césped en la calle Barenys, junto al estadio municipal actual. La idea, presentada hace unos días en la hoja de ruta para la legislatura, prevé que este equipamiento esté operativo este mismo 2017 y se pueda gestionar mejor la petición de horas para competiciones y entrenos de los diferentes colectivos y equipos de la ciudad.

Otro de los aspectos a destacar de los presupuestos son los 930.000 euros previstos para una renovación integral de las aceras y viales de la ciudad. «A partir de este próximo año debemos apostar fuerte por un mantenimiento de nuestras calles y viales. Es una de las prioridades para que la ciudad esté adecuada y mejore la calidad de vida y de los servicios que ofrecemos».

Dentro de esta adecuación de Salou también se planteará en 2017 el inicio de transformación de la calle Carles Buïgas, una de las principales arterias de la capital de la Costa Daurada, al igual que la peatonalización parcial de algunas de las calles perpendiculares al paseo Jaume I.


Fiscalidad congelada
El presupuesto de ingresos se incrementa un 6,9% a pesar de la congelación en las ordenanzas fiscales. La previsión de una mejor coyuntura económica abre la vía a mayores ingresos en tasas como la de construcciones y obras; la de ocupación de vía pública o una mayor recaudación por la tasa turística.

A la previsión de ingresos sin afectar, de momento, el bolsillo del contribuyente hay que sumar el remanente positivo que se espera y que el Ayuntamiento ya ha anunciado que se destinará a activar la urbanización y el desarrollo del sector04, esta zona urbana donde el Ayuntamiento tiene intención de crear una ciudad deportiva y un pequeño polígono industrial de escaparate.