Salou tendrá nueva estación en 2023 y exige una línea directa con Barcelona

Adif Alta Velocidad ha licitado el contrato de obras para la construcción de la nueva estación ferroviaria de Salou-Port Aventura por un importe de 14.503.008,88 euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución estimado de 24 meses a partir de su adjudicación. Los plazos apuntan a otoño para conocer la empresa o empresas que llevarán a cabo las obras.

El alcalde de Salou, Pere Granados, admitía ayer a última hora su «satisfacción» por ver uno de los proyectos reclamados en la rampa de salida. «Estamos muy contentos de la licitación y aunque podría haber sido mucho antes, lo importante es que la nueva estación sea una realidad», explicó.

Con la puesta en servicio de la variante Vandellòs-Tarragona del Corredor Mediterráneo, la antigua estación de Salou dejó de prestar servicio y el actual apeadero de PortAventura se había convertido en la nueva estación del municipio, pero debe dotarse de todas las características y servicios necesarios para prestar servicio como estación terminal.

Granados insite en que «la estación provisional debe seguir operando en Salou, mientras que el nuevo edificio cobra forma en los próximos dos años a partir de la adjudicación». El alcalde estima que la nueva estación estará operativa en 2023.

El objetivo de esta actuación es adaptar el actual apeadero a las necesidades actuales de la explotación ferroviaria, adecuarlas y ampliarlas a las demandas de los clientes del ferrocarril y mejorar su funcionalidad. Entre las actuaciones comprendidas en el proyecto, incluido en el Pla de Rodalies, destacan el nuevo edificio de viajeros, en el que se creará un vestíbulo principal con zona de espera, un área de explotación pública que contará con zona de venta de billetes y atención al cliente para distintos operadores, un espacio de explotación privada con dependencias internas y cuartos de instalaciones, un local comercial y aseos públicos.

Inconformismo

Granados explica que la transformación en esa zona de la ciudad no sólo será la nueva estación ferroviaria. Allí irá también la estación de autobuses que convertirá la zona en un nudo de transporte para poder tener una red eficaz de comunicaciones.

No obstante, Granados recuerda que «la estación es una excelente noticias, pero hay otras deudas pendientes con la ciudad. Queremos que la R17 llegue a Salou y conecte directamente con Barcelona lo antes posible, ya que debemos tener las comunicaciones ferroviarias que merece una capital del turismo como esta».

Respecto a los andenes de la futura estación, se remodelará el actual (de 240 metros de longitud y 5 de anchura), y se construirá uno nuevo de similares dimensiones junto a la vía principal. Ambos andenes estarán unidos en su cabecera mediante una plataforma de 9,5 metros de anchura que los conectará con el edificio de la estación.  También contarán con una marquesina de 200 metros, así como en la cabecera de conexión con el edificio.

Al ser una estación terminal, se ejecutarán toperas al final del andén existente en la vía 2 y la vía general de la vía 1 y se adecuarán las instalaciones ferroviarias (electrificación, vías, señalización y comunicaciones) a la nueva configuración de la estación.

Parking para 200 vehículos

Por otro lado, se proyecta un aparcamiento en superficie de 200 plazas para automóviles, de las que 10 estarán reservadas para personas de movilidad reducida, y espacio para motocicletas y bicicletas. Asimismo, se incluyen áreas para subida y bajada de viajeros, y estacionamiento de taxis. Tanto el aparcamiento como la parada de taxis y el espacio para subida y bajada de viajeros contarán con marquesinas.

Se urbanizarán los accesos, con la definición de los viales necesarios para organizar los diferentes tráficos. También se instalarán nuevos cerramientos de seguridad en todo el ámbito de la nueva estación, según refleja el proyecto de Adif Alta Velocidad.