Su presencia es un bioindicador de la buena calidad ambiental de una zona natural. En Calafell ya se habían detectado nidos de erizos de tierra en diferentes espacios verdes y se realiza un seguimiento. Incluso se han colocado barreras vegetales en esos puntos para evitar que puedan ser dañados por gatos o perros ya que son su principal amenaza.
Pero ha sorprendido la presencia de ejemplares en el parque de actividades de ocio Calafell Aventura. El diseño que se hizo de la instalación ya contempló que estaba el un espacio natural de un pinar y junto a una riera por lo que se tuvo en cuenta la sostenibilidad.
En Calafell Aventura se ha observado a erizos de tierra. No es extraña su presencia ya que es un animal nocturno y a esas horas el parque está cerrado. Allí encuentra insectos, que forman parte de su dieta, y agua, además de no tener depredadores.
El agua de las instalaciones no se clora mucho para favorecer esa biodiversidad, se evitan los herbicidas y las plantas son autóctonas. Ello ha ayudado al asentamiento de erizos en el entorno y en ocasiones entran al parque.
Pero es necesario el respeto a sus madrigueras y en el caso de ver a algún ejemplar no tocarlos. En España está prohibido coger un erizo del medio con la intención de domesticarlo. Son muy sensibles.