La chimenea de la central térmica de Cubelles ya comienza a perder altura. El que ha sido un punto de orientación para muchos vecinos del Baix Penedès y Garraf comienza a desaparecer del paisaje de la costa.
Después de que fuese desmontada la chimenea interior de mahones, ahora es la exterior la de hormigón la que empieza a desaparecer.
Los trabajos los ejecuta un robot de cinco brazos que derriba la estructura hacia el interior. Los cascotes son retirados por una apertura en la base de la chimenea. El robot lo controlan unos operarios desde una plataforma dos metros por debajo del punto de derribo.
La demolición de la chimenea se alargará todavía unos tres meses.
Mira el vídeo del derribo: