Calafell empieza a perfilar el futuro de los terrenos y de la histórica discoteca Louie Vega que cerró definitivamente sus puertas en 2012.
El Ayuntamiento impulsa una modificación del planeamiento urbanístico que permita unos usos diferentes a los residenciales como estaba contemplado desde hace años.
El alcalde Ramon Ferré ha explicado en la emisora local que el proyecto tira adelante con la modificación del plan urbanístico que ya está ultimado.
Louie Vega fue una de las discotecas más célebres de Catalunya. La imagen del avión empotrado en una de sus fachadas fue símbolo de la noche desde que abrió en 1988 y hasta cuando cerró en 2008.
Hubo un intento de reactivación en 2010 pero que sólo duró dos años. Ya entonces, como en un última época anterior, se había alejado del glamour de los primeros años y fue un punto de conflictos y peleas.
Tras el cierre la discoteca quedó completamente saqueada y vandalizada hasta el punto que tuvo que vallarse para evitar poder acceder y que ocurriese algún accidente. Ya desde entonces y con el histórico local en degradación acelerada se planteó qué hacer allí.
Finalmente el Ayuntamiento decidió comprar terrenos y edificio pensando en un destino que pudiese dar un impulso al municipio. Por 1,6 millones de euros toda la finca pasó a ser de propiedad municipal.
El consistorio, además de disponer de ese terreno evitaba que pudiese aparecer otro comprador que levantase una promoción de más de 100 viviendas y una zona comercial como permitía el planeamiento de la zona.
Los propietarios acumulaban una deuda con el Ayuntamiento que con la compra quedó saldada. Entonces se pensó a qué destinar el terreno de 10.000 m2 y el edificio de la discoteca que en su día recibió un premio FAD de diseño y arquitectura y que está protegido.
Intentará salvarse el edificio de la discoteca y para todo ese ámbito la nueva catalogación es de equipamiento y hotelero. Se piensa en un proyecto de dinamización turística y en hostelería.
También se plantea un centro de interpretación sobre el mundo íbero ya que la ciudadela ibérica está anexa al terreno adquirido.
La finca queda a pie de la travesía de la C-31 para la que también hay un proyecto de remodelación para que pase a tener aspecto de vía urbana y no de carretera.
El avión
Louie Vega dictó la diversión y la música a varias generaciones durante años. Explicaban que el nombre de rendía homenaje a la aviadora Louie Vega, que se estrelló con su avioneta Comper Mouse en 1956 en ese mismo lugar.
Puedes ver lo que quedó de aquel templo para muchos.
